En unos días en los que se están batiendo récords sobre cuánto se dispara el precio de la luz, hay una alternativa: agrupar a interesados, poner una fecha límite y empezar a negociar con las comercializadoras de luz. Ese es el funcionamiento básico de una compra colectiva de luz y gas natural. El objetivo, conseguir una tarifa de gas, luz, o ambas, a un coste mucho más reducido que el que se puede encontrar en el mercado.
Son muchas las organizaciones de consumidores que en los últimos tiempos han decidido poner a prueba a las comercializadoras con este método. La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), por ejemplo, ya ha realizado tres compras colectivas de las que, dice, se han beneficiado miles de hogares con un ahorro medio de 148 euros al año.
Según reconoció el propio ministro de Energía, Álvaro Nadal, la subida esperada este año para quienes tienen contratada la tarifa regulada de electricidad rondará los 100 euros. Por lo tanto, el ahorro compensaría.
En estos momentos, desde el 29 de noviembre, se encuentra abierta la compra colectiva de la Asociación Nacional de Ahorro y Eficiencia Energética (Anae) y Selectra. Desde ese día, se han inscrito más de 9.600 personas que, según los cálculos de los organizadores, podrían conseguir un ahorro de hasta 180 euros al año por usuario. Pero, ¿qué supone participar en uno de estos procesos?
Particulares o pymes
El consumidor, que puede ser un particular o una pyme, se inscribe en la plataforma habilitada en el apartado que le interese: tarifas de gas, electricidad u oferta conjunta. Además, se indica qué tipo de vivienda es la que recibe el suministro y cuál es la energía utilizada. El proceso es gratuito. A partir de ahí, comienza el juego.
"Nosotros fijamos las bases y se las mandamos a las comercializadoras que se apunten", explican a EL ESPAÑOL desde Selectra. Es aquí cuando empieza el diálogo y la negociación. "Nos aseguramos de cuál es el precio, durante cuánto tiempo, qué condiciones exactas ofertan...", apuntan.
Cambiar de tarifa...o no
Una vez que reciben todas las ofertas, se celebra una subasta y seleccionan a la ganadora. "A veces, incluso abrimos una segunda ronda de negociaciones entre las mejores", indican.
Cuando hay una ganadora, comunican a todos los participantes en la compra cuál es la oferta. "Es muy importante conocer qué ocurre después del periodo comprendido en la oferta, qué pasa luego". Es entonces cuando, al recibir las condiciones, los participantes deciden si les interesa inscribirse o no. Después, proceden al cambio de suministro. "Cualquiera puede apuntarse a la compra colectiva hasta el último día de la negociación", apuntan desde Selectra: "Cuantos más seamos, mejor para negociar".
En el momento en el que termina el periodo de la oferta, el consumidor puede apuntarse a otra compra colectiva para buscar opciones más rentables, continuar en la compañía o volver a la original. A gusto del consumidor.