El ministro llegará al Patio de Floridablanca a las 9.30 horas, acompañado el secetario de Presupuestos, Alberto Nadal, y otros altos cargos del ministerio, y a las 9.45 horas, en el Salón de Pasos Perdidos del Palacio de la Carrera de San Jerónimo, entregará el proyecto de ley a la presidenta de la Cámara Baja.

Montoro ofrecerá una rueda de prensa a las 10.30 horas en la Sala Ernest Lluch para presentar el proyecto de Presupuestos aprobado por el Consejo de Ministros, y posteriormente está previsto que los portavoces de los grupos parlamentarios comparezcan ante los medios para ofrecer una primera opinión.

Y mientras Montoro comparece ante los medios de comunicación, el proyecto de Presupuestos será calificado por la Mesa del Congreso, que se reúne a las 10.30 horas. A partir de entonces, se abre el plazo de presentación de enmiendas a la totalidad.

El paso siguiente será su publicación en el Boletín Oficial de las Cortes Generales y a continuación se abrirá un plazo de uno o dos días para solicitar las comparecencias de los altos cargos del Gobierno con el fin de explicar las cuentas.

TRAS SEMANA SANTA, DESFILE DE ALTOS CARGOS

Eso sí, las comparecencias no tendrán lugar hasta después de Semana Santa, ya sea en torno al 20 de abril o la semana siguiente. Será el momento para que los grupos parlamentarios decidan si presentan o no enmiendas de totalidad pidiendo la devolución del proyecto.

El plazo para registrarlas acabará el 27 ó 28 de abril, y se calcula que el debate tendrá lugar, previsiblemente, los días 3 y 4 de mayo. En esa segunda jornada se celebrará la votación de enmiendas a la totalidad, que se votarán conjuntamente ya que todas piden lo mismo: devolver el proyecto al Gobierno.

La votación tendrá lugar cuando el presidente del Gobierno haya recuperado la capacidad de disolver las Cortes y convocar elecciones, ya que no puede hacerlo hasta un año después de la anterior disolución de las Cámaras (3 de mayo de 2016).

Del resultado de la votación dependerá el futuro de los Presupuestos de 2017, pues ahí se decidirá si siguen su tramitación o son 'tumbados' por la oposición y devueltos al Gobierno.

Para esa cita, y dado que el PSOE y Unidos Podemos mantienen su decisión de presentar enmienda de totalidad, el PP necesitará sumar, además de sus socios electorales de UPN y Foro Asturias y de sus aliados de investidura Ciudadanos y Coalición Canaria, al grupo del PNV, lo que le aseguraría 175 diputados que garantizan al menos el empate, que ya basta para derribar las enmiendas de la oposición.

En caso de superar esa primera votación, se abriría un plazo para la presentación de enmiendas al articulado, que serían debatidas por la Comisión de Presupuestos, inicialmente a puerta cerrada en fase de ponencia, y después ya en abierto en comisión durante la segunda y la tercera semana de mayo.

EL PNV DA EL EMPATE PERO NO BASTA EN LA FASE FINAL

El apoyo del PNV, además del de Ciudadanos y CC, asegura también al PP la victoria en la Comisión de Presupuestos, pero no sería suficiente para la fase posterior, en el caso de que los Presupuestos volvieran al Pleno del Congreso a finales de mayo para aprobarlos sección por sección (las cuentas de cada ministerio).

Ahí no basta con el empate, sino que se precisa más votos a favor que en contra, y sólo con perder una sección, las cuentas de un ministerio determinado, todo el proyecto presupuestario se desplomaría.

Para afrontar esta tramitación, el presidente Mariano Rajoy asegura contar con 175,5 votos. En ese sentido, el Gobierno ha abierto una vía de negociación con Nueva Canarias, partido con el que el PSOE concurrió en coalición electoral los pasados comicios, y cuyo apoyo serviría al Ejecutivo para obtener la mayoría necesaria en el Pleno.

Si los Presupuestos concluyen con éxito su tramitación en el Congreso, empezarán a debatir se en el senado, ya en junio, donde seguirán el mismo procedimiento, con la diferencia sustancial de que la mayoría absoluta del PP garantiza un tránsito mucho más cómodo de las cuentas.