Pedro vive solo. Por eso no tiene más remedio que afrontar todas las tareas domésticas en el único momento del día en el que tiene tiempo, justo antes de ir a trabajar. Ya se ha planchado una camisa y aprovecha para poner una lavadora mientras se hace la comida. La música le acompaña en la cocina, aunque de vez en cuando se acerca al ordenador para echar un vistazo a las últimas noticias. Sin despistarse, que la vitrocerámica está puesta y no es precisamente de los que tienen mano con los tiempos.
La estampa no es extraordinaria. Realmente no hace falta vivir solo, ni que el único tiempo disponible para el hogar sean las horas previas a trabajar. El caso es que, muchas veces, no tenemos más remedio que concentrar nuestro consumo eléctrico en un momento específico del día, mientras que durante el resto de la jornada, cuando no estamos en casa, apenas hay gasto.
Sin variar las rutinas
La familia Gómez presenta una agenda diferente. Hace cuatro años que disfrutan de un apartamento en la playa al que se escapan cada vez que pueden. Por ejemplo, este fin de semana. Se espera un tiempo excepcional así que el baño está asegurado pero seguramente haya que tirar de aire acondicionado para soportar las horas en las que el sol pega con más fuerza.
Eso, en términos prácticos, se traduce en un aumento del consumo de energía. Y más si se le suma la puesta en marcha de los electrodomésticos, de la lavadora para no llevarse a casa nada sucio o de la televisión y la videoconsola, que los más pequeños suelen tener puesta casi constantemente.
En su caso el gasto se circunscribe a un día concreto, el sábado, ya que el domingo saldrán pronto para evitar el tráfico. ¿Se imaginan que esa jornada de mayor -y casi único- desembolso no les costara nada? ¿O que Pedro pudiera aprovechar sus horas de máxima actividad eléctrica sin pagar un céntimo? Pues esto, que suena casi a imposible, es lo que propone la tarifa Tempo Happy de Endesa: o un día a la semana o dos horas al día en los que el precio del kilovatio/hora es cero, nada, gratis. Y no momentos cualquiera, sino los que el propio cliente elija. Son dos caminos que conducen al mismo destino: pagar menos en las facturas de la luz.
Tantas posibilidades como personas
Hay tantas posibilidades como personas y porque cada uno tenemos diferentes circunstancias, la mayor ventaja de esta tarifa es que ella se adapta ti y no al revés. Su versatilidad permite reducir la facturación sin cambiar la rutina de nuestro día a día. Más de 200.000 clientes ya la pagan menos gracias a esta modalidad que, por otra parte, no implica permanencia y se adapta a tus necesidades si estas cambian.
Laura y su novio Rafa se interesaron por la tarifa Tempo Happy aunque tenían ciertas reservas. Pensaban que, si hay un período gratuito, el precio durante el resto del tiempo subiría para compensar la rebaja. Pero la respuesta es clara y concisa: el coste del kilowatio/hora fuera del horario elegido es fijo y se corresponde con el de otras tarifas de Endesa en el mercado libre. Pero el mejor argumento es la propia factura: según el caso es fácil poder pagar hasta el 20% menos de luz; en euros, suponen una reducción de entre 100 y 150 euros de media al año.
Para esta pareja, desde luego, compensa. Es verdad que pasan mucho tiempo fuera y su consumo no es muy elevado. Sin embargo, no tienen calefacción en casa y ahora que llega el frío tendrán que tirar de radiadores eléctricos por la mañana, cuando ambos se duchan y se preparan para ir al trabajo. Así que su horas Happy son, a diferencia de la media, matutinas. Es, en definitiva, su momento.
El único condicionante es que las horas elegidas deben ser consecutivas. Recomendable también para aprovechar el potencial de la tarifa es disponer de un contador inteligente telegestionado. Actualmente, el 80% de los contadores ya son así y el resto lo serán desde el año próximo. Hasta entonces, los que no dispongan de uno no se quedan fuera, ni mucho menos. Mientras se activa la telegestión se toma como referencia para la Tempo Happy la curva estándar de Red Eléctrica Española, que indica que el mayor consumo en España se da entre las 21 y las 23 horas.
Los nuevos contadores permiten afinar los horarios incluso más allá de la percepción personal, ya que recogen el gasto exacto de cada hora de cada día y ofrecen todos esos datos al cliente. Las herramientas de análisis, los gráficos y el asesoramiento personalizado por parte de Endesa ayudan a aprovechar al máximo los datos. Así es posible convertir esta tarifa no solo en un método de ahorro sino en una herramienta dinámica. Sin compromiso y sin coste adicional: como la facturación pasa a ser mensual, el cambio es efectivo desde la próxima factura.
Estefanía, cliente de Tempo Happy, había elegido el domingo como día a coste cero. Era la única jornada que podía pasar en casa y aprovechaba para poner en orden todo, sentarse en el sofá a ver alguna serie e incluso, por qué no, hornear un bizcocho, su gran hobby. No obstante, debido a un cambio laboral comenzó a trabajar en casa. Y comprobó que su horario de mayor consumo había pasado a ser durante las mañanas de los días laborables. Nada más fácil: a través de la misma aplicación en la que tiene toda la información pudo readaptar sus horas Happy a las nuevas circunstancias y así, pagar menos por su consumo. Tan sencillo.