Tanto la organización que lidera Unai Sordo como la de Pepe Álvarez consideran que para abordar la negociación del IV Acuerdo Estatal de Negociación Colectiva (AENC) con la patronal es imprescindible que los salarios participen del crecimiento económica y de la situación de bonanza que las empresas mantienen desde 2014, que se recupere progresivamente el poder de compra y que haya una mejora de la situación de quienes tienen los salarios más bajos.

Durante la presentación de esta propuesta, ambos secretarios generales han afirmado que a las organizaciones sindicales "no les da miedo hablar de productividad a la hora de conformar una oferta salarial".

La inflación actuará como "suelo" en esta propuesta "sin bandas salariales", según los sindicatos, que han hecho hincapié en que "los salarios no pueden volver a perder poder de compra en ningún caso".

"No proponemos un dígito porque cada sector y empresa debe adaptar los criterios mencionados a sus cifras reales", han apostillado Sordo y Álvarez, tras insistir en que lo fundamental es la productividad y recuperar lo perdido en cada empresa y sector.

Así, si la productividad es inferior al 1,6% del IPC, la subida de los salarios sería una suma del aumento de la inflación más el incremento adicional del 1,5% por la pérdida de poder adquisitivo. Por el contrario, si la productividad es superior a los precios, el 1,5% se sumaría al porcentaje de productividad determinado en la compañía o el sector.

Además, le han transmitido al Gobierno que necesitan información "fiable" para saber cómo evoluciona en cada empresa o sector. Las dos organizaciones sindicales creen que el Ejecutivo no debería oponerse a dar estos datos, ya que consideran "no se pueden negar los instrumentos para poder constatar".

En esta línea, han recordado que es posible tener constancia de estos datos empleando el código de convenio colectivo al que las empresas están adscritas y que están obligadas a facilitar a la Administración.

Por otro lado, respecto al tercer factor clave (la subida adicional) para recuperar el poder adquisitivo perdido desde 2008, los sindicatos han afirmado que es necesario que los salarios tengan participación en el reparto de la renta generada en las empresas, algo que se ha desequilibrado en contra de los trabajadores. Por ello, creen que, tanto este año como el próximo, debe haber un aumento adicional de los salarios de 1,5%.

INCLUIR UNA CLÁUSULA DE REVISIÓN SALARIAL

Para evitar que si la inflación sube por encima del 1,6% los salarios vuelvan a perder poder adquisitivo, las organizaciones sindicales han subrayado que en su propuesta incluirán una cláusula de revisión salarial que garantice la mejora del poder de compra del año en curso y la recuperación del poder adquisitivo perdido.

CC.OO. y UGT creen que los salarios de convenio no pueden ir "a remolque" de lo que sucede en el Salario Mínimo Interprofesional (SMI). "El SMI no debería tirar de los sueldos al alza, sino que los sueldos de las empresas deberían estar mayoritariamente y apreciablemente por encima de ese sueldo legal mínimo", según los sindicatos.

Es por este motivo por el que consideran que, si el SMI va a situarse en los 850 euros en 2020, los salarios más bajos de convenios deberían ser superiores. Por ello, reclamarán a la patronal que haya un SMI de convenios de 1.000 euros brutos al mes.

"OPTIMISTAS"

Pese a la ser conscientes de que el debate con la patronal "no va a ser sencillo", tanto Sordo como Álvarez han asegurado que son optimistas. "No es fácil, pero todo es posible, veremos cómo se va desarrollando", ha subrayado el líder de UGT.

Por su parte, Sordo ha insistido en que es un temario amplio para debatir con las organizaciones empresariales y para acordar. "Creemos que el acuerdo negociación colectiva es un gran instrumento para abordar todas las cuestiones que tienen que ver con las relaciones laborales. Este es el talante con el que iniciamos este proceso de negociación", ha añadido.

Las organizaciones sindicales se reunirán este jueves con la patronal para retomar el diálogo en el marco de la comisión de seguimiento del IV AENC con la intención de acercar posturas para llegar a un nuevo acuerdo de cara a los próximos años.

El acuerdo, según Sordo y Álvarez, tendrá una duración de más de un año, aunque han recordado que "todavía no hay nada cerrado". "Queremos que la negociación colectiva sea un instrumento de reparto de la riqueza, que nos permita que la recuperación económica llegue a muchos trabajadores a los que no ha llegado", ha subrayado Álvarez.