El consumo de cemento repunta un 11% en 2017 y confirma su recuperación
El consumo de cemento creció un 11% durante el pasado año, hasta sumar un volumen de 12,3 millones de toneladas, impulsado por el tirón de la promoción de nuevas viviendas y las exportaciones, informó la patronal del sector Oficemen.
26 febrero, 2018 11:14La industria cementera instalada en España vuelve así a crecer, al superar la caída del 3% que se anotó el pasado año, que interrumpió dos ejercicios de crecimiento. La demanda de cemento logra volver a crecer en España a pesar de que la obra pública, principal destino de este material de construcción, sigue en mínimos históricos.
No obstante, la patronal de las cementeras da por "confirmado" el "inicio de la recuperación del sector". De hecho, confía en que el cemento intensifique su crecimiento este año y cierre con un aumento del consumo del 12%, hasta sumar 13,7 millones de toneladas.
LEJOS DE RECUPERAR LO PERDIDO
A pesar de ello, Oficemen recuerda que estos volúmenes están aún lejos de recuperar el desplome del 80% que este sector experimentó durante la crisis, desde los máximos históricos de 56 millones de toneladas de cemento que se llegaron a demandar en los años 2006 y 2007.
En el caso de la obra pública, el descenso es del 75%, de forma que este sector apenas consume actualmente unos 5 millones de toneladas de cemento al año, frente a los 19 millones de toneladas que requería en 2008. En este sentido, Oficemen calcula que en el supuesto de que la construcción de infraestructuras recuperara esos niveles de demanda de cemento, se generarían medio millón de empleos.
'FACTURA DE LA LUZ'
En cuando a las exportaciones, la patronal de fabricantes de cemento volvió a denunciar la "pérdida de competitividad" para vender a otros países que genera al sector el "incremento de los costes eléctricos". La industria española soporta actualmente uno de los costes más elevados de Europa, hasta un 30% más caros, "lo que penaliza su competitividad exterior", denuncia Oficemen.
A pesar de ello, España figura actualmente como primer país exportador de cemento de la UE y el octavo a escala mundial. Para mantener estas posiciones, Oficemen reclama una política de apoyo a la industria que, "entre otras medidas pase por facilitar un precio eléctrico competitivo y razonablemente previsible".