La madrugada del domingo termina el horario de verano y empieza el horario de invierno: a las 3.00 horas serán los 2.00 horas -en Canarias a las 2.00 horas será la 1.00-, lo que implica que en la noche del sábado al domingo se dormirá una hora más.

El cambio de hora de verano a invierno se produce el último domingo de octubre en toda Europa, de acuerdo a la Directiva Comunitaria del Cambio de Hora, que es de obligado cumplimiento con el objetivo de lograr un ahorro energético, aunque esto podría cambiar antes de 2020, ya que la Comisión Europea ha propuesto eliminarlo y el Gobierno se ha mostrado "bastante de acuerdo".

Concretamente, la Comisión Europea ha dejado la decidión en manos de los gobiernos y les ha pedido celeridad en la toma de decisión para conseguir que el último cambio de hora en el bloque comunitario ocurra en 2019 y que tenga lugar sin ocasionar problemas como consecuencia de la falta de coordinación entre las capitales.

Según el calendario planteado por la Comisión Europea, el último cambio de hora obligatorio tendrá lugar el 31 de marzo de 2019 y los Estados miembros que deseen volver a la hora de invierno realizarán una última modificación el 27 de octubre. A partir de esa fecha no se podrán hacer más cambios. Para ello, la Eurocámara y el Consejo de la UE -la institución en la que están representados los países- deben acordar y aprobar la normativa como muy tarde en marzo de 2019.