El ministro alemán de Finanzas, Olaf Scholz, ha pronosticado que los largos años de auge económico en Alemania están llegando a su fin a partir del último año fiscal de 2018, en declaraciones publicadas este domingo por el Bild am Sonntag.
"Los buenos tiempos en los que el Estado recaudaba más de lo esperado se están agotando", ha advertido Scholz. "Los años de las vacas gordas han terminado", ha añadido.
El político socialdemócrata reafirmó las aspiraciones de su partido de convertirse en primera fuerza en las elecciones generales de 2021 y ocupar la jefatura de gobierno. Sobre si se creería capaz asumir la cancillería, el líder de centroizquierda respondió con un rotundo "sí".
Scholz es vicecanciller de la gran coalición en la que el Partido Socialdemócrata (SPD) es socio menor de los conservadores de la canciller Angela Merkel, quien anunció su retirada de la presidencia de la Unión Demócrata Cristiana (CDU) y fue sucedida a finales de 2018 por Annegret Kramp-Karrenbauer.
"La señora Kramp-Karrenbauer acaba de decir que se espera de un presidente de partido que sea capaz de asumir la Jefatura de Gobierno. Lo mismo vale para un vicecanciller de Alemania. Pero esta no es una cuestión que nos ocupe ahora ni a la CDU ni a nosotros", ha declarado. El SPD ha perdido fuelle en los sondeos de opinión y oscila entre el 14% y el 16%. Los socialdemócratas aún debaten sobre los efectos de la flexibilización del mercado laboral impulsada por el ex canciller Gerhard Schröder.
Scholz ha rechazado las demandas de sectores izquierdistas del partido de abolir las reformas, pero ha abogado por mejorar las prestaciones para los desempleados que aportaron durante años a los sistemas sociales.
"El que pierde el empleo necesita una garantía para seguir capacitándose. Y el que trabajó 20 ó 30 años y contribuyó al seguro de desempleo espera mejores prestaciones".