El fabricante de ascensores Zardoya Otis obtuvo en 2018 un beneficio después de impuestos de 145,7 millones de euros, un 4,6 % menos que en 2017, por el impacto de los gastos relacionados con su plan de digitalización y la evolución desfavorable del precio de la materia prima.

Su resultado bruto de explotación (ebitda) a cierre de 2018 ascendió a 208,7 millones de euros, un 5,5 % menos que el año anterior, según los resultados que ha remitido este jueves la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

La cifra de ventas fue de 784,4 millones de euros, un 0,8 % más que en 2017.

El valor de las ventas nuevas fue de 56,5 millones de euros, un 16 % más que en 2017, mientras que la actividad de Servicio facturó 550,7 millones de euros, un 1 % más, y supuso el 70,2 % de las ventas totales del grupo.

Los contratos recibidos de instalaciones, tanto en nuevas edificaciones como en edificios existentes, ascendieron a 189,1 millones de euros al cierre de 2018, un 4,1 % menos que en 2017.