El presidente de BBVA, Carlos Torres Vila, ha elogiado sin reparos la figura de su antecesor, Francisco González, pero al mismo tiempo ha prometido "tolerancia cero" con el resultado de la investigación encargada por el banco sobre la relación de la entidad con el excomisario José Manuel Villarejo.

Además, ha contado que el expresidente de BBVA le transmite "una conciencia muy tranquila" y la idea de que "no sabía nada" sobre los supuestos pinchazos a políticos, empresarios e incluso periodistas a través de una empresa del excomisario. Y ha añadido que le cree.

Piensa también que está actuando igual que lo hubiera hecho su antecesor, "con la máxima contundencia", pero ha insistido en que "no hay que prejuzgar" y pedir la dimisión de FG, como se le conoce en el sector, como presidente de honor de BBVA sería hacerlo.

Sobre la investigación encargada a la consultora PwC, ha advertido, puede durar meses, aunque la instrucción es actuar para que sea "lo más profunda y rápida posible".