Helsinki, 1 feb (EFECOM).- La compañía sueco-finlandesa Stora Enso, uno de los mayores grupos forestales y papeleros del mundo, obtuvo un beneficio neto de 988 millones de euros en 2018, lo que supone un aumento del 61 % respecto al ejercicio anterior, informó este viernes la empresa.

Stora Enso registró un beneficio bruto de explotación (ebitda) de 1.878 millones de euros durante el pasado año, un 18,3 % más en términos interanuales.

Su ganancia neta operativa (ebit) creció un 32 %, hasta 1.325 millones de euros, debido principalmente al aumento de los precios del papel, la celulosa, y el cartón, que contrarrestó con creces el incremento de los costes productivos, según la compañía.

La facturación de Stora Enso aumentó un 4,4 % en 2018, hasta 10.486 millones de euros, empujada por la subida generalizada de los precios de casi todos sus productos.

El grupo nórdico resaltó en un comunicado que ha logrado encadenar ocho trimestres consecutivos de crecimiento de ventas, pese a la caída del volumen de entregas de todos sus productos excepto el cartón de consumo y la madera.

La división de papel, la más importante en términos de facturación, vendió 4,59 millones de toneladas, un 2,6 % menos que el año anterior, aunque sus ingresos aumentaron un 5 %, hasta los 3.066 millones de euros.

La mejora de su rentabilidad permitió que el negocio del papel generase un ebit de 234 millones de euros, un 82,7 % más en términos interanuales, tras varios años de declive por la caída de la demanda global y la saturación del mercado mundial.

El negocio del cartón de consumo continuó su firme crecimiento y facturó 2.622 millones de euros, un 4,2 % más, tras aumentar un 3,5 % el volumen de entregas, hasta los 2,91 millones de toneladas.

No obstante, su rentabilidad se vio afectada por el elevado aumento de los costes variables, especialmente de la celulosa, la madera y los químicos, y su ebit se redujo un 18,8 %, hasta los 231 millones de euros.

La división de biomateriales, centrada en la producción de celulosa, también aumentó las ventas y facturó 1.635 millones de euros, un 10,3 % más, pese a que el volumen de pedidos disminuyó un 6,3 %, hasta 2,43 millones de toneladas.

La mayor parte de esta celulosa fue producida en las plantas de Montes del Plata (Uruguay) y Veracel (Brasil), dos empresas de las que es propietaria al 50 % junto a la chilena Arauco y la brasileña Fibria, respectivamente.