El ministro de Petróleo y presidente de la petrolera estatal venezolana PDVSA, Manuel Quevedo, dijo este domingo que la empresa logró contener la caída de la producción de crudo, en declive, según dijo, desde 2008, aunque no precisó cuántos barriles está produciendo la compañía.

"Hemos detenido la caída de la producción, eso es un logro que yo lo he denominado heroico de los trabajadores, heroico veníamos en caída libre (...) desde 2008", dijo en una entrevista grabada y transmitida este domingo por el canal privado Televen.

El ministro señaló que en diciembre la empresa comenzó a registrar un "leve incremento", pero no precisó en cuanto y reiteró que 2016 y 2017 años fueron "muy duros" para la industria petrolera venezolana por la caída de los precios del crudo.

Recordó además que la empresa ha pasado por dificultades debido a las "traiciones" y los casos de corrupción que se han registrado en la compañía y por los que la Fiscalía ha abierto varias investigaciones.

Según Quevedo, son "cientos" las investigaciones del Ministerio Público, que ha informado sobre la detención de más de 100 gerentes de PDVSA.

"Hemos conducido junto a la Fiscalía cientos de investigaciones y de detenciones (...) hemos sustituido más de 400 gerentes en cargos que están de administración, de dirección, un poco para renovar la fuerza pero principalmente para que PDVSA" sea una empresa "moral", dijo.

Volvió a referirse a las últimas sanciones de EEUU a la petrolera y su filial en ese país, Citgo, y dijo que la nación norteamericana busca apropiarse de los campos petroleros venezolanos.

Con motivo de estas sanciones, que afectan activos valorados en 7.000 millones de dólares, el pasado 29 de enero Quevedo dijo que la estatal modificará sus operaciones y evalúa declarar "fuerza mayor".

Según expertos, las sanciones contra PDVSA contraerán severamente el flujo de caja de Venezuela, un país que extrae de la industria petrolera casi el 96% de sus ingresos.

Además, impactarán el abastecimiento de bienes básicos y combustibles, un fenómeno que ya afecta con fuerza en algunos estados fronterizos.

La producción del país, que cuenta con las mayores reservas probadas de crudo del mundo, se sitúa en el nivel más bajo de las últimas tres décadas, a excepción de varios meses entre finales de 2002 y principios de 2003, cuando una huelga en PDVSA desplomó la producción hasta menos de 100.000 barriles diarios.