El grupo farmacéutico y químico alemán Merck KGaA subió en 2018 el beneficio neto atribuido hasta 3.374 millones de euros, un 29,5 % más que un año antes, tras la venta del negocio de medicamentos sin receta a Procter & Gamble.
Merck informó hoy de que el beneficio operativo empeoró en el mismo periodo un 28,7 %, hasta 1.727 millones de euros, por los efectos negativos de los tipos de cambio.
El año anterior también había tenido ingresos extraordinarios por la desinversión del negocio de biosimilares.
La facturación mejoró el pasado ejercicio un 2,2 %, hasta 14.836 millones de euros.
Los tipos de cambio tuvieron un efecto negativo del 3,9 % por la debilidad del dólar frente al euro y la depreciación de divisas en Latinoamérica.
La división de medicamentos con receta mantuvo el volumen de negocios en 6.246 millones de euros (+0,9 %), la de ciencias de la vida la subió a 6.185 millones de euros (+5,2 %) y la de materiales lo redujo a 2.406 millones de euros (-1,7 %).
"2018 fue para Merck un año de transición y de inversiones. Hemos logrado un resultado sólido en un entorno de mercado dinámico y conseguido nuestros objetivos financieros", dijo el presidente del comité ejecutivo, Stefan Oschmann.
Merck también redujo su endeudamiento hasta 6.701 millones de euros (-33,9 %) con la venta de la división de medicamentos sin receta.
La dirección de Merck propondrá mantener el reparto de dividendo por el año 2018 en 1,25 euros por acción, como en 2017.
Para el 2019 Merck prevé un crecimiento moderado de la facturación, descontados los efectos de los tipos de cambio y adquisiciones o desinversiones, en comparación con el 2017.