Madrid, 3 abr (EFECOM).- El Instituto de Estudios Económicos (IEE) ha instado al futuro Gobierno a utilizar la colaboración público-privada para innovar y modernizar la administración pública, ya que las empresas tienen una mayor capacidad de adaptarse a los nuevos avances tecnológicos.

Durante el acto de presentación del libro "La colaboración público-privada en la gestión de los servicios públicos", organizado este miércoles por IEE, el presidente del Instituto, José Luis Feito, ha confiado en que los estudios que engloba el libro "puedan servir al nuevo Gobierno para que haga algo en este ámbito".

El libro reflexiona sobre la necesidad de la colaboración público-privada en la prestación de los servicios públicos, destacando ventajas que suponen incrementos de los recursos para la Administración, compartir los riesgos que acarrea cualquier proyecto y una mayor eficiencia y flexibilidad en la gestión de los servicios.

El catedrático de Estructura Económica y uno de los autores Ramón Tamames ha asegurado que la apuesta por esta colaboración entre el sector público y las empresas impulsa la modernización del país, una estrategia que debe crecer a pesar de la inestabilidad política.

Con esta colaboración, los expertos aseguran que las administraciones públicas cuentan con una mayor capacidad de inversión en la gestión de los servicios públicos, pudiendo garantizar su prestación en condiciones de calidad sin necesidad de aumentar su nivel de endeudamiento.

Además, el entorno competitivo en el que se mueven las empresas privadas requiere de inversiones en investigación y desarrollo, de las que se pueden beneficiar tanto las Administraciones como, en última instancia, los ciudadanos.

El consejero jurídico y exministro de Trabajo del gobierno del PP Manuel Pimentel, también autor, ha explicado que, dentro de la colaboración público-privada, el servicio siempre es público y que lo que se privatiza es la gestión.

Los autores del libro coinciden en apostar por "ecosistemas fértiles" en la colaboración publico-privada, como son las nuevas tecnologías y el salto digital.

"Es una alianza estratégica posible y deseable para una sociedad de vanguardia", ha remarcado Pimentel.

No obstante, existen críticas que ponen en duda la idoneidad de esta estrategia de colaboración, sobre todo en los servicios públicos municipales, entre las que destacan que el objetivo de ganar beneficios de las empresas va en contra del interés colectivo.