Madrid, 24 de abril (EFECOM).- Las residencias de estudiantes atrajeron una inversión de 141 millones de euros, repartida en 18 transacciones de suelo y edificios para su reconversión durante 2018, las cuales generarán 6.200 camas adicionales en este sector.
La falta de producto se ha traducido en un enfoque centrado en la promoción y los nuevos proyectos, lo que llevará a que haya unas 7.500 camas adicionales en 2020 y hasta 16.500 para el año 2022 en España, debido a los 47 proyectos en desarrollo, según un informe publicado este miércoles por la consultora inmobiliaria JLL.
La inversión de 2018 estuvo condicionada por las operaciones realizadas en 2017 con la compra de la dos principales empresas del sector Resa y Nexo por un importe de 530 millones de euros entre ambas operaciones, lo que provocó que no hubiera activos construidos en el mercado y obligara a los inversores a centrarse en el suelo.
Entre las principales empresas con proyectos en marcha, se encuentran Nexo y Resa, las líderes del sector en España, así como inversores internacionales como W.P. Carey.
El mercado español ofrece ahora mismo algo más de 91.000 camas en residencias para un total de aproximadamente 330.000 estudiantes que se alojan anualmente fuera de sus casas para estudiar, por lo que el director de Living de JLL, Nick Wride, asegura que hay un importante margen de crecimiento en el sector.
España además atrae anualmente a mas de 110.000 estudiantes extranjeros, un número que creció por encima del 9 % en 2018.
Madrid y Barcelona son las ciudades con una mayor oferta con 18.000 y 9.000 plazas, respectivamente, que se ofrecen a un precio medio de 800 euros al mes en caso de la capital y de 713 euros al mes en el caso de la Ciudad Condal a cambio del alojamiento sin pensión incluida.
En la actualidad, existen ocho proyectos residenciales en Madrid que aumentarán la capacidad de la ciudad en 2.700 camas hasta 2022 y 6 en Barcelona, cuya oferta se incrementará en aproximadamente 1.800 plazas.
No obstante, las nuevas instalaciones en desarrollo se reparten por toda la Península y la capacidad de varias ciudades como Sevilla, Granada, Málaga y Bilbao.