La aerolínea Norwegian presentó este jueves una pérdida neta de 1.489 millones de coronas (155 millones de euros) en el primer trimestre y estimó el coste de la crisis de los Boeing 737 MAX en hasta 500 millones (52 millones de euros).

La compañía noruega es una de las más afectadas por la prohibición de vuelo temporal de los Boeing 737 MAX -de los que posee 18 unidades- decretada por las autoridades de varios países a causa del accidente mortal de una aeronave de ese modelo en Etiopía el mes pasado y de otro en Indonesia en octubre.

Norwegian "está evaluando el impacto financiero de inmovilizar los Boeing 737 MAX 8", señaló en su balance la aerolínea, que ha mantenido "reuniones productivas" con el gigante estadounidense en las que se ha discutido "cómo maniobrar entre las dificultades que la situación está causando".

La tercera aerolínea de bajo coste en Europa había anunciado anoche en un comunicado a la Bolsa de Oslo acuerdos con Boeing y con Aipara aplazar la entrega y la compra de varios aviones en los próximos años, lo que supondrá una reducción del gasto de capital de unos 3.000 millones de dólares (2.680 millones de euros).

La pérdida neta registrada entre enero y marzo contrasta con el resultado negativo de 46 millones de coronas noruegas (5 millones de euros) del mismo período de hace un año.

El resultado después de entonces se vio beneficiado por una ganancia de 1.940 millones (200 millones de euros) por la reclasificación de una inversión en Norwegian Finans Holding.

La pérdida neta de explotación (ebit) se redujo un 34 % interanual hasta 1.459 millones (152 millones de euros).

El beneficio antes de intereses, impuestos, depreciación, amortización y alquileres (ebitdar) ascendió a 88 millones (9 millones de euros), frente a una pérdida de 881 millones (92 millones de euros) un año atrás.

Norwegian facturó por 7.992 millones (830 millones de euros) entre enero y marzo, un 14 % más interanual, gracias a sus rutas intercontinentales y al aumento del tráfico en los países nórdicos.

La aerolínea noruega transportó a más de 8 millones de pasajeros, un 9 % más interanual, con un factor de carga del 81 %.

La compañía señaló en su balance que su prioridad es volver a beneficios a través de iniciativas como un programa extenso de reducción de costes -que ha permitido recortar 467 millones (49 millones de euros) este trimestre-, una cartera de rutas optimizada y la venta de aviones.

"Estoy satisfecho con la evolución positiva en el trimestre pese al problema con los 737 MAX. Hemos impulsado medidas para mejorar la rentabilidad reduciendo costes y aumentando ingresos", señaló su consejero delegado, Bjørn Kjos, quien hace semanas había asegurado que pedirán una compensación económica a Boeing.

Norwegian ha compensado el déficit de capacidad causado por los 737 MAX aplazando la venta de aviones antiguos, alquilando aeronaves y aprovechando sus 787 Dreamliner en rutas muy solicitadas.