El Banco de Inglaterra mantiene los tipos en el 0,75% a la espera del Brexit
- El organismo mejora su previsión del PIB pero advierte de la caída de la inversión empresarial
- La institución también vota a favor de mantener sus medidas no convencionales
El Comité de Política Monetaria del Banco de Inglaterra (BoE, por sus siglas en inglés) ha decidido de forma unánime mantener los tipos de interés en el 0,75%, mientras que también ha votado a favor de no introducir variaciones en sus medidas no convencionales de estímulo monetario, según ha informado la autoridad monetaria este jueves, a la expectativa de cómo evolucionen las negociaciones sobre la retirada del Reino Unido de la UE.
De este modo, los miembros del Comité del BoE han votado en bloque a la hora de mantener en 10.000 millones de libras esterlinas (11.646 millones de euros) la emisión de reservas del banco central para financiar la compra de deuda corporativa, así como de continuar con el programa de 435.000 millones de libras esterlinas (506.607 millones de euros) de compra de bonos soberanos.
La autoridad monetaria británica ha explicado que sus decisiones siempre se tomarán con el objetivo de que la inflación se sitúe en torno al 2%, de forma que ayude a mantener un crecimiento sostenido del empleo y de la economía.
Así, las perspectivas económicas "seguirán dependiendo en gran medida de la naturaleza y del momento de la retirada de la UE". De forma particular, el BoE ha apuntado que los asuntos más relevantes serán los nuevos acuerdos comerciales que finalmente se pacten entre la UE y Reino Unido, si el 'divorcio' es sin acuerdo o con acuerdo, y la forma en cómo respondan los hogares, las empresas y los mercados financieros.
"El camino apropiado de la política monetaria dependerá del balance de estos efectos sobre la demanda, la oferta y el tipo de cambio", ha subrayado el BoE, añadiendo que cualquier respuesta por su parte al Brexit, sea cual sea su forma, "no será automática y podría ir en cualquier dirección".
REVISIÓN AL ALZA DE LAS PROYECCIONES
No obstante, a pesar del Brexit y de los temores a una desaceleración mundial, el BoE confía en el crecimiento de la economía del país y ha elevado al alza sus previsiones macroeconómicas.
En este sentido, ha revisado al alza su estimación para el Producto Interior Bruto (PIB) referido al primer trimestre de este año, desde el 0,2% hasta el 0,5%. En el segundo trimestre, prevé que se ralentice hasta el 0,2%, aunque calcula que cerrará este año 2019 con un crecimiento del 1,5%, tres décimas por encima del dato de su última proyección.
Sin embargo, ha reconocido que el Brexit está teniendo un impacto "particularmente pronunciado" en la inversión empresarial, que lleva cayendo desde hace un año.
De igual modo, prevé un repunte de la economía del 1,6% para 2020, una décima más que en febrero, y del 2,1% en 2021, cifra dos décimas superior a la de la proyección anterior. En este periodo, el BoE cree que la inversión empresarial se recuperará y que el gasto de los hogares continuará apoyando el crecimiento de la demanda gracias al aumento de los ingresos reales.
Si la economía se desarrollara en línea con estas proyecciones, el BoE ha indicado que irá endureciendo, de forma "gradual y limitada", sus medidas de política monetaria, si bien cree que la postura actual es "la apropiado".