El grupo inmobiliario Colonial ha alcanzado en el primer trimestre un beneficio neto de 23 millones de euros, un 4,5 % más que en el mismo período de 2018.
Los ingresos por rentas han llegado a 87 millones, un 6 % más, y el ebitda (beneficio bruto de explotación) se ha situado en 64 millones, 2 más que en 2018.
Colonial ha formalizado 25 contratos de alquiler correspondientes a más de 32.000 metros cuadrados y a rentas anuales de 13 millones, ha informado la compañía a la CNMV, el supervisor bursátil.
Tanto en Barcelona como en Madrid y París, la empresa ha firmado rentas superiores a las de mercado.
El grupo ha llegado a acuerdos de prealquiler en su cartera de proyectos, como el alcanzado con la fundación Cartier para el alquiler del proyecto Louvre Sant Honoré en París por un período mínimo de 20 años.
Además, ha firmado un contrato de alquiler de 17 años de duración en el proyecto Pedralbes con la marca japonesa Uniqlo para crear en Barcelona su tienda de referencia en Europa.
La desocupación total del Grupo Colonial se sitúa en niveles del 4 %, si bien la cartera de oficinas de Barcelona y París presentan unas ratios de desocupación de solo el 1 %.
La compañía continúa con su estrategia de desenvertir productos no estratégicos secundarios y reinvertir los fondos obtenidos en nuevas oportunidades de creación de valor.