Pacto de Fridman con la banca incluye nueva línea de crédito de 380 millones
El acuerdo alcanzado por el mayor accionista de DIA, Mijaíl Fridman, y la banca acreedora incluye una nueva línea de financiación por valor de 380 millones de euros que ayudará a cubrir "las necesidades de liquidez" del grupo.
Así figura en la documentación sobre el pacto enviada este lunes por LetterOne -sociedad a través de la cual Fridman es dueño del 69,76 % de DIA- a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), que recoge entre otros puntos la prohibición de distribuir dividendos hasta que tanto la financiación existente como estos 380 millones adicionales hayan sido devueltos.
Concretamente, esta inyección de fondos se dividirá en tres: una línea de financiación de 200 millones por tres años, otra por 100 millones por otros tres años que sólo se ejecutará una vez recibida íntegramente la anterior, y una última de 80 millones por un año dirigida exclusivamente a las operaciones con proveedores.
Además, la banca acreedora también ha aceptado extender la fecha de vencimiento de toda la deuda del grupo DIA hasta el 31 de marzo de 2023, la que era la principal exigencia de Fridman.
En este sentido, el acuerdo precisa que la compañía no tendrá que pagar anticipadamente esta deuda cuando ejecute las ventas de sus cadenas Clarel y Max Descuento, ya colocadas a la venta y por las que la empresa esperaba recibir más de 100 millones de euros.
Sobre la implicación de los bonistas, el que ha sido el principal escollo para que el Banco Santander -la entidad con más volumen de deuda de DIA- aceptara las condiciones propuestas por Fridman, en el documento se informa de que DIA está autorizada a recibir 400 millones de euros para poder refinanciar los bonos que vencen en 2021, aunque sólo es una opción y no está obligado a ello.
La presidenta del Santander, Ana Botín, ha avanzado hoy en declaraciones a los periodistas que la entidad había intentado llegar a un acuerdo "bueno para todos".
"Como hemos dicho desde el principio, (con la propuesta planteada por el principal accionista, Mijaíl Fridman) los bonistas extranjeros reciben el 100 % y a los bancos españoles les están ofreciendo algo que realmente es muy inferior", ha explicado.