Brasilia, 22 may (EFECOM).- El Gobierno brasileño ha revisado a la baja su proyección de crecimiento económico para este año y la ha situado en un 1,6 %, frente al 2,2 % que calculaba en enero, informaron este miércoles fuentes oficiales.

El secretario de Hacienda, Waldery Rodrigues, recordó que esa expansión del 1,6 % había sido barajada ya "hace unas semanas" por el ministro de la cartera, Paulo Guedes, en función de las "expectativas que existían en el mercado", que ya están ahora por debajo de esa tasa y se ubican ahora en un 1,4 %.

"Sabemos que las expectativas tienden a la baja, pero en función de algunas variables que estamos manejando la mantuvimos en 1,6 %", explicó el funcionario, en un tácito reconocimiento de que podría haber una nueva revisión en los próximos meses.

Rodrigues señaló que, pese a lo que esperaba el mercado, el Gobierno no ha decidido todavía sobre posibles recortes en sus presupuestos, que prevén para 2019 un déficit fiscal de 139.000 millones de reales (unos 34.750 millones de dólares), equivalentes a casi el 3 % del Producto Interno Bruto (PIB).

Por el contrario, anunció que el Ministerio de Economía liberará un total de 5.370 millones de reales (1.342 millones de dólares) del llamado "fondo de contingencia", una reserva de los presupuestos que puede ser utilizada en caso de falta de recursos.

Las mayores partidas de esos recursos del fondo serán destinadas a los ministerios de Educación y del Medio Ambiente, que ya habían tenido parte de sus presupuestos congelados, debido a la continúa caída de la recaudación fiscal en un escenario económico frágil.

En el caso de la educación, se había congelado el 30 % de los presupuestos de las universidades públicas, lo que generó la semana pasada la que hasta hoy ha sido la mayor protesta contra el Gobierno del ultraderechista Jair Bolsonaro, que fue encabezada por miles de estudiantes y profesores descontentos con esa medida.

La economía brasileña, aunque creció un 1,1 % en 2017 y tuvo el mismo comportamiento en 2018, aún sufre las secuelas de la que fue una de sus peores crisis en décadas, ocurrida entre 2015 y 2016, un período en el que cayó en picado y perdió siete puntos porcentuales.