Presidente Deutsche Bank defiende gestión tras reveses como fracasada fusión
Berlín, 23 may (EFECOM).- El presidente de Deutsche Bank, Christian Sewing, defendió hoy su primer año de gestión al frente del primer banco comercial privado de Alemania, en el que, dijo, a pesar del "fuerte viento en contra", como el fracasado intento de fusión con el Commerzbank, se han cumplido todos los objetivos fijados.
A pesar de todos estos eventos, desde el suspenso del test de estrés de la Reserva Federal estadounidense (Fed) hasta los registros de las oficinas de la entidad en noviembre por sospechas de blanqueo, pasando por calificaciones de deuda críticas, "y aunque a primera vista no lo parezca, en 2018 hemos logrado mucho", dijo.
En su discurso ante la Junta General de Accionistas, Sewing se congratuló por el hecho de que la entidad haya vuelto a tener beneficios en 2018, por primera vez desde 2014, y se mostró convencido de que se ha logrado sentar las bases en el camino hacia un banco sosteniblemente rentable.
Respecto a las negociaciones de fusión con Commerzbank, segundo banco comercial privado de Alemania, parcialmente nacionalizado, el presidente del Deutsche Bank subrayó que es de "máxima prioridad" para la entidad crear para sus accionistas "un valor añadido", razón por la cual finalmente se tomó una decisión contraria a esta unión.
"Si se abre la posibilidad de fusión con el segundo banco en Alemania, tenemos que analizarlo", cualquier otra cosa habría sido negligente", dijo, y reiteró su opinión de que "el panorama bancario europeo está demasiado fragmentado" y "mucho habla a favor de una consolidación".
Subrayó que para Deutsche Bank estaba claro desde el principio que la fusión sólo era una opción si económicamente tenía sentido y se iba a traducir en una mayor rentabilidad a largo plazo para sus accionistas y una mejora en los servicios a los clientes.
"Tras un exhaustivo análisis estaba claro para nosotros que nuestro propio plan es el mejor", afirmó, y se refirió a la "transformación" y a la fase de crecimiento que debe seguir a la "estabilización" que se ha logrado para la entidad en el último año.
En este sentido, dijo ser consciente de la "aparente contradicción" que supone que a pesar de haber alcanzado los objetivos y haber vuelto a hace rentable la entidad, las acciones del banco "anoten niveles históricamente bajos".
Hoy se discutirá y se escucharán muchas críticas, se hablará entre otras cosas de "una cotización decepcionante" y "no creo que nadie esté más decepcionado que yo sobre nuestros resultados en bolsa", declaró, y aseguró que esta decepción le servirá de empuje para tratar de revertir esta situación.
Sewing dijo apostar por la "integridad" y la "disciplina" para lograr el éxito a largo plazo y aseguró que quiere devolver el sentimiento de "orgullo" a los que trabajan para la entidad, "fundamental para la motivación".
"Naturalmente queremos volver a estar en una posición en la que podamos ofrecerle más dividendos que los once céntimos por acción que les proponemos de nuevo hoy", dijo por otro lado.
En la misma línea se expresó el presidente del consejo de supervisión, Paul Achleitner, quien lamentó que a pesar de la "exitosa lucha" por alcanzar todos los objetivos de 2018, las acciones del Deutsche Bank coticen actualmente por debajo de los 7 euros.
Achleitner subrayó la necesidad de ser "más rápidos y radicales" en la transformación, para lo cual apostó por las cuatro propiedades con las que la entidad "ya superó antes tiempos difíciles": ser estable y global al tiempo que innovadora y flexible.
"Si no podemos crecer a través de una fusión, entonces tendremos que hacerlo orgánicamente, a nivel nacional e internacional", dijo al referirse a la fracasada fusión con el Commerzbank.
A este respecto dijo que el consejo de supervisión nunca se vio presionado a nivel político y que este organismo, a su vez, tampoco ejerció nunca presión sobre la junta directiva.
"Fue la decisión de la presidencia iniciar las negociaciones y fue la decisión de la presidencia finalizar las negociaciones", dijo, y aseguró que para el consejo de supervisión la decisión última fue "compresible y correcta".