Economía

OHL abre investigación para detectar posibles fallos en modelo anticorrupción

28 mayo, 2019 13:55

Actualiza con más declaraciones del presidente de la compañía y acuerdos de la junta.

El presidente de OHL, Juan Villar-Mir de Fuentes, ha informado este martes de que el grupo está llevando a cabo una investigación interna de su modelo de prevención de prácticas de corrupción con el fin de detectar posibles fallos y proponer de forma inmediata las correspondientes mejoras.

"Esta compañía está, ha estado y seguirá estando firmemente comprometida con las buenas prácticas de gobierno corporativo, con la transparencia, ética e integridad como principios irrenunciables", ha aseverado el ejecutivo durante su intervención en la junta de accionistas celebrada este martes por la compañía, que se ha visto envuelta en casos de corrupción como Púnica o Lezo.

"No pretendo eludir asuntos que la actualidad informativa está reiteradamente llevando a titulares, en mi modesta opinión la mayor parte de las veces poco matizada y con datos incompletos, arrojando dudas sobre los procedimientos de la compañía en materia de buen gobierno cuando estos son irreprochables", ha dicho Villar-Mir Fuentes, quien ha señalado que estos mecanismos se adaptan de forma continuada a cada requerimiento normativo.

No obstante, están llevando a cabo una investigación interna de su sistema anticorrupción, a lo que ha añadido que la compañía cuenta con un código ético de obligado cumplimiento por parte de todos sus empleados y que rige las relaciones con socios, contratistas y todo tipo de colaboradores.

Además, en 2015, el consejo de administración aprobó una política anticorrupción en la que se compromete a realizar negocios con integridad, evitando cualquier forma de corrupción y cumpliendo con todas las leyes antisoborno y anticorrupción aplicables.

"Todos estos mecanismos confirman el altísimo grado de compromiso que esta compañía tiene y va tener con las mejores prácticas de buena gobernanza", ha dicho Villar-Mir de Fuentes, que ha reiterado que OHL cuenta "con estrictos procedimientos internos", se rige por el principio de tolerancia cero a la corrupción y trabaja siempre en la máxima colaboración con la justicia.

"Podemos decir con la frente muy alta, que desde 1911, ningún directivo o empleado de OHL ha sido condenado nunca por ningún supuesto de corrupción", ha afirmado Villar-Mir de Fuentes, cuyo padre, expresidente y fundador del grupo, Juan Villar-Mir ha sido investigado por su presunta participación en casos de corrupción.

Durante su intervención ante la Junta de Accionistas, que lo ha renovado como consejero, el ejecutivo ha defendido la reorganización, reestructuración y redimensionamiento llevadas a cabo por la compañía y ha asegurado que esto tendrá sus frutos ya en 2019, un año que dará muchos motivos de satisfacción.

A las críticas a la gestión de OHL, que el año pasado perdió más de 1.500 millones, vertidas por dos accionistas del grupo, ha reconocido que se han hecho cosas mal pero que la compañía ha sido capaz de superar el tsunami al que se ha tenido que enfrentarse y hoy cuenta con las bases para "tirar para adelante" y volver a ganar dinero.

Ha defendido la actuación de su máximo accionista, el GVM (al que representa), y ha afirmado que la compañía vale mucho más de lo que marca la bolsa y que ningún otro accionista de control podría hacerlo "mejor".

OHL cerró 2018 con unas pérdidas de 1.529,8 millones de euros, frente a los 12,1 millones negativos de 2017, lastrado por resultados no recurrentes como, por ejemplo, la venta del negocio de concesiones, que restó al resultado 550,5 millones, o proyectos fallidos por valor de 235,3 millones.

Los accionistas de OHL han aprobado, entre otros puntos del orden del día, la ratificación como consejero ejecutivo de José Antonio Fernández Gallar, que fue nombrado consejero delegado de OHL por el consejo de administración en junio del año pasado.

Fernández Gallar accedió al cargo después de que presentara su dimisión Juan Osuna, que dejó la compañía tras fichar por Aleatica, empresa surgida tras la compra de OHL Concesiones por IFM y con la que el grupo constructor mantiene desavenencias en torno a dos obras.