Cellnex no descarta comprar más torres de telecomunicaciones en 2019 y 2020
La empresa de infraestructuras de telecomunicaciones Cellnex no descarta acometer más adquisiciones este año y el que viene tras el éxito en marzo de su ampliación de capital de 1.200 millones de euros, que posibilitó la compra de 10.700 emplazamientos en Francia, Italia y Suiza.
"Eso te da confianza. Es una muestra del apoyo por la vía de los hechos" ha valorado el consejero delegado de la compañía, Tobías Martínez, en una entrevista con
Esas cifras permitieron a Cellnex, principal operador de infraestructuras de telecomunicaciones inalámbricas de Europa, reforzar su credibilidad en el mercado y convencer a clientes como el grupo francés Iliad o la suiza Salt Mobile de que no sólo tiene músculo financiero para comprar sus torres sino también para acompañarles en el despliegue de nuevas redes durante años o incluso décadas, con la vista puesta en el desarrollo inminente de la tecnología 5G.
La prioridad es "ganar escala" donde ya opera Cellnex -España, Francia, Italia, Países Bajos, Reino Unido y Suiza-, asegura Martínez, que no descarta entrar en otros países de la Unión Europea si surge una oportunidad.
"La compañía está proponiendo ideas constantemente a todos los clientes en todos los países, forma parte de nuestro ADN de alianza con los clientes", indica.
Esta fase de crecimiento de Cellnex se enmarca en un posible cambio de tendencia hacia la externalización de torres mediante su venta por parte de los grandes operadores de telecomunicaciones con el fin de liberar caja para invertir en su negocio o reducir deuda.
Los analistas consideran positiva esa opción para el sector, ya que facilita en algunos casos cumplir la política de dividendos, tener mejores calificaciones por parte de las agencias de rating -con lo que se pagan menos intereses por la deuda emitida-, ahorrar gastos de mantenimiento de estas infraestructuras y, en consecuencia, una subida de sus cotizaciones.
"Lo importante es que tengan un contrato que les permita el acceso al mercado a través de una torre o de un emplazamiento, independientemente de que dicho activo esté en su balance", explica Martínez.
La propuesta de Cellnex para estas compañías es, además de comprar las infraestructuras de las que desean desprenderse, ser socio industrial a largo plazo y ayudar a sus clientes a reducir los costes operativos.
"Europa es un mercado de telecomunicaciones maduro. La cobertura ha dejado de ser una ventaja competitiva. Los márgenes del sector son cada vez más estrechos, lo cual presiona el Ebitda del conjunto de actores, mientras que las inversiones se mantienen o incluso aumentan con las subastas de espectro, el despliegue de las redes 5G, llevando la fibra a las torres, a los hogares... Y tienes que invertir con el mercado", detalla.
En esa nueva encrucijada para los operadores de telecomunicaciones, el apoyo de Cellnex en la gestión de estos activos y los objetivos compartidos con sus clientes convierten a la compañía española en un actor diferente de sus competidores estadounidenses y son la clave de su éxito en Europa, su mercado natural por la seguridad jurídica que ofrece, destaca Martínez.
El potencial para Cellnex en la zona aún es notable, ya que opera 45.000 torres dentro de un mercado de 400.000. Por ello, el directivo considera que el 5G, que significará una mayor densificación de los puntos de las redes, sobre todo en las áreas urbanas, será un "viento de cola" para Cellnex, pero "no va a marcar un antes y un después en su historia".
Se ha especulado en la prensa con que las torres en el Reino Unido de CTIL, la sociedad conjunta entre Vodafone -que en mayo anunció un recorte de su dividendo anual, que llevaba incrementando año tras año desde 1998- y Telefónica, podrían ser el próximo objetivo de Cellnex.
Martínez admite que es un activo que "gusta y encaja" en la estrategia de la compañía, pero advierte de que afronta la posible operación, sobre la cual aún no hay certeza alguna, con "cierta prudencia" ante los distintos horizontes que se plantean para el "Brexit".
Si hubiera acuerdo entre Londres y la UE, "no debería ser un obstáculo para invertir fuertemente en Reino Unido", pero la cosa cambiaría si la salida del país del bloque fuera por las bravas. "Un 'Brexit' duro llevaría un tiempo para entender las implicaciones", indica.
Para sufragar sus proyectos futuros, Martínez explica que en los próximos meses la compañía evaluará todos los instrumentos financieros a su alcance, incluida la emisión de deuda en sus distintas formas, sin excluir una ampliación de capital vinculada a proyectos o un consorcio con inversores financieros. Sin embargo, reconoció que el éxito de la reciente ampliación de capital "pesa".
No obstante, el umbral de dolor de las agencias de calificación crediticia en términos de endeudamiento es importante para Cellnex, de ahí que mantenga con ellas una "interacción total". Martínez ha comentado que, antes de ejecutar proyectos, el grupo analiza los impactos que puedan tener en su calificación para ver cuál es la estructura de capital que necesitará en el futuro.
"En los próximos 12 meses tendremos que tomar alguna decisión al respecto para poder seguir creciendo y definir el nivel de apalancamiento adecuado de la compañía", avanza.
Sin embargo, esgrime también a su favor que Cellnex puede ofrecer visibilidad a largo plazo de flujos de caja "como pocas empresas en el mercado", ya que en la actualidad cuenta con 36.000 millones de euros en servicios contratados.
La deuda neta del grupo se situó al cierre del primer trimestre en 2.113 millones de euros.
Respecto al conflicto de Estados Unidos con el gigante de las telecomunicaciones Huawei, al que la Administración Trump acusa de hacer funciones de espionaje para China, Martínez considera que se trata de "algo más que el 5G; es un equilibrio de poderes entre dos superpotencias". Por ello, defiende que las decisiones se deberían tomar "a nivel europeo, no de un país o de dos".