El Tesoro vende por primera vez en negativo bonos a 5 años e indexados a 11
(Actualiza la EC4171 con más datos)
Madrid, 6 jun (EFECOM).- El Tesoro Público ha colocado hoy bonos a tres y cinco años y obligaciones a once años y medio indexadas a la inflación, por un total de 2.934 millones de euros, todos ellos a tipos negativos, por primera vez en el caso de los de 5 años y los ligados a la evolución de los precios.
La caída de los tipos en el mercado de emisiones refleja la evolución fuertemente bajista en el secundario, en el que la rentabilidad de los bonos españoles a 10 años -el instrumento de referencia- marca día tras día mínimos históricos porque las múltiples incertidumbres en el entorno están desplazando la inversión de renta variable a fija.
Según datos del mercado, en esta primera subasta de junio en bonos a tres años el Tesoro ha colocado 1.348 millones de euros (2,6 veces más que los 3.508 solicitados por los inversores), a un interés marginal del -0,357 %, frente al -0,240 % de la subasta anterior.
En este plazo los tipos en el mercado primario llevan en negativo, con alguna intermitencia, desde junio de 2016, año en el que marcaron una media del -0116 %, que en 2017 llegó al -0,229 % y en 2018 cerró en el -0,219 %.
En bonos a cinco, los inversores han comprado finalmente 1.110 millones de euros (2,5 veces sobre los 2.835 millones demandados) a un interés marginal del -0,090 %, también por debajo de la referencia anterior, que estaba en positivo, en el 0,033 %. Es la primera vez que el Tesoro coloca deuda a cinco años a tipos negativos.
En la subasta de bonos indexados a la inflación con vencimiento en noviembre de 2030 (con vida residual de 11,6 años) los inversores han demandado títulos por 1.456 millones y finalmente se han adjudicado 476 millones a un tipo marginal del -0,259 %, inferior al 0,126 % de abril último.
En este tipo de referencias, con vencimiento superior a los 10 años, también es la primera vez que el Tesoro coloca a interés negativo, aunque sí había adjudicado a tipos por debajo de cero en obligaciones indexadas a la inflación a 10 años, tanto en 2018, cuando la media se situó en el -0,154 % como en la subasta celebrada en abril pasado, que salió al -0,326 %.
Esta bajada de rentabilidades está en consonancia con el fuerte descenso que ha experimentado la deuda en el mercado secundario, en mínimos históricos, resultado de la aversión al riesgo de los inversores, que salen de la renta variable ante las incertidumbres relativas al crecimiento mundial o la guerra comercial, entre otras.