La banca pide el fin de los bajos tipos de interés y ve lejos fusiones en UE
Santander, 19 jun (EFECOM).- Los presidentes de CaixaBank y Bankia, Jordi Gual y José Ignacio Goirigolzarri, han pedido el fin de la política de bajos tipos de interés del BCE y han analizado los retos del sector, como la digitalización, mejorar la reputación y las fusiones paneuropeas, que ven aún lejanas, pues no hay "incentivos" regulatorios.
En el curso de la UIMP sobre finanzas sostenibles, organizado por la APIE y BBVA, en la que también han participado el presidente de Mapfre, Antonio Huertas, el secretario general de CCOO, Unai Sordo, y el presidente de CEOE, Antonio Garamendi, los banqueros han dejado claro, no obstante, que los menores ingresos que obtendrán si no suben los tipos no les harán cambiar sus planes estratégicos.
Para Goirigolzarri, la política monetaria del BCE tiene otra derivada, ya que podría abaratar el precio y afectar a la privatización de Bankia, propiedad en un 61 % del fondo de rescate español, el Frob.
Ha pedido también que se ponga fin a los cambios normativos y regulatorios que afectan a los bancos diez años después del inicio de la crisis, aunque ha afirmado que es importante asegurarse de que todos los actores del mercado tengan idéntico tratamiento para evitar arbitrajes regulatorios que en el pasado han sido "fuente de desestabilización del sistema".
Goirigolzarri ha dicho que Bankia "evaluará" el objetivo de obtener un beneficio de 1.300 millones de euros en 2020 que prevé el plan estratégico en vigor, aunque no ahora, y ha renovado el compromiso de repartir un dividendo de 2.500 millones de euros "en cualquier entorno de tipos de interés".
Gual ha abogado por una banca comprometida con la ética y socialmente responsable con su entorno, porque es "la única manera de preservar la reputación", sobre todo tras la crisis financiera.
CCOO y la CEOE han resaltado el reto de la digitalización, el cambio climático y la revolución tecnológica.
El secretario general de CCOO, Unai Sordo, ha considerado que la concentración bancaria y la digitalización han supuesto una "expulsión significativa" del mercado de trabajo de empleados del sector financiero, aunque ha especificado que en los ERE acordados con los sindicatos, el último en el Banco Santander, se ha buscado la voluntariedad y lograr las mejores condiciones de salida.
El sector financiero ha eliminado 95.000 empleos desde 2008 en España, ya que ha habido una destrucción de 110.000 puestos de trabajo y se han incorporado en torno a 15.000 personas, ha recordado.
En cuanto a las negociaciones para formar Gobierno, ha pedido que no se demonice una posible coalición entre el PSOE y Unidas Podemos, ya que España necesita una política de legislatura con perspectiva para corregir las reformas laboral y de pensiones.
El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha considerado que no habrá nuevo Gobierno hasta después del verano, ha lamentado el boicot a empresarios catalanes que apoyaron la candidatura de Manuel Valls al ayuntamiento de Barcelona y ha animado a las 5.000 empresas que han trasladado su sede fuera de Cataluña a volver.
El presidente de Mapfre, Antonio Huertas, ha insistido en la idea de que la cuantía de las pensiones públicas debería ajustarse para que "den para todos", aunque ha afirmado que se seguirán pagando porque el Estado garantiza el sistema público de pensiones.
Tras recomendar que los trabajadores complementen su futura pensión con ahorro privado, Huertas ha aprovechado para anunciar el lanzamiento del primer fondo de inversión que tiene el objetivo de invertir en empresas que promueven la inclusión laboral de personas con discapacidad.