Economía

Cinco Jotas busca en Nueva York convertir el jamón en producto de lujo global

19 junio, 2019 16:10

La compañía Cinco Jotas busca convertir desde Nueva York el jamón ibérico en un producto de lujo global que esté en la "élite de la gastronomía", a la manera en la que lo está el foie francés o el caviar del este de Europa.

El director de área para Estados Unidos de la marca, Joseba Castaños, ha explicado a Efe la intención de la firma de "poner en valor los productos nacionales" de España, cuya máxima expresión puede ser el jamón, y no tanto vender a chefs como el reconocido José Andrés, "nuestro embajador aquí", sino a cocineros internacionales que hagan que el producto llegue a otro público.

Por ejemplo, el dos estrellas Michelin Gabriel Kreuther, cuyo restaurante en pleno centro de Manhattan, a pocos metros de la céntrica Times Square, que utiliza el ibérico de Cinco Jotas como raciones, pero también como materia prima para unas tapas que debutaron ayer martes como celebración del Día Mundial de la Tapa.

Así, el jamón se convirtió en la estrella de dos clases de aperitivos -uno con vieiras y otro de caponata, piñones y ricota-, acompañado de un vino blanco de Alsacia, la tierra del chef.

Kreuther ha afirma en un acto en Manhattan que descubrió el jamón en España por casualidad, durante un viaje por la península cuando llegó a una tienda con varias patas colgando y, dispuesto a probar todas para descubrir el mejor, compró doce diferentes.

Según Kreuther, la de Cinco Jotas fue la que más le gustó, lo que le impulsó a utilizar el ibérico en su menú, del cual valora también el tiempo que requiere su curación para que los jamones lleguen a las mesas.

"No importa si es francés, americano o griego. Si el producto es bueno no entiende de lenguas", subraya Castaños.

Cinco Jotas fue una de las protagonistas de la pasada gala de los premios Óscar al convertirse en la atracción principal del menú.

"Hemos traído jamón ibérico antes, pero nada como el Cinco Jotas. Es el mejor que hemos tenido jamás", indicó a Efe en aquella ocasión el cocinero austríaco Wolfgang Puck, encargado durante 25 años del convite del evento.