Javier Otazu
Kenitra (Marruecos), 20 jun (EFECOM).- El rey Mohamed VI de Marruecos inauguró hoy en Kenitra, a unos 45 kilómetros al sur de Rabat, una planta del grupo automovilístico francés PSA Peugeot Citroën, que producirá el próximo mes de julio 100.000 unidades y 100.000 motores con capacidad de doblarlo antes del fin de 2021 con una inversión total de 280 millones de euros.
El modelo que será producido es el Peugeot 208 solo en su versión clásica de diésel y gasolina, porque la unidad eléctrica se producirá en una planta que el mismo grupo tiene en Tarnava en Eslovaquia.
La finalidad de la compañía francesa con el Modelo 208 es exportarlo a ochenta países, concretamente en África y Oriente Medio.
Los automóviles producidos en esa planta serán trasnsportados al puerto de Tánger Med, vía ferrocarril de forma provisional a la espera de que finalicen las obras del nuevo puerto de Kenitra que está a 20 kilómetros de la planta.
Las ventajas que ha dado Marruecos al grupo PSA Peugeot son sobre todo fiscales, porque la planta se sitúa en una zona franca llamada Atlantic Free Zone, al este de la ciudad de Kenitra, y eso incluye incentivos en el IVA, en el impuesto de sociedades (IS) y tasas aduaneras.
Además, Marruecos ofreció carreras de formación de ingenieros que acabarán trabajando en esta planta.
El ministro marroquí de Industria y Equipamiento marroquí, Mulay Hafid Alamy, dijo en declaraciones a la prensa que el salario de un ingeniero en Marruecos cuesta la mitad que en Bélgica.
Lo cual ha permitido la creación de 2.300 de empleos en esta planta de Kenitra, de los cuales un 85 % son ingenieros.
A estos oficios se añaden 19.000 empleos que el ecosistema en torno a Peugeot ha creado a través de 62 fábricas que abastecen a la gran planta y que producen llantas, parabrisas, asientos, entre otros.
Estas empresas auxiliares han permitido una tasa de integración de un 60 %.
El vicepresidente ejecutivo de PSA Peugeot para Oriente Medio y el Norte de África, Jean-Christophe Quemard, indicó en declaraciones a la prensa que Marruecos "está en el corazón" de la estrategia de la empresa, y agradeció "todas las facilidades" que el ofreció el país magrebí.
"Enviamos una señal fuerte a los inversores sobre nuestra estrategia industrial: queremos ser una base mundial de la industria de automoción", precisó.
Quemard añadió que su empresa ofrece un centro de investigación y otro de formación adaptado a sus necesidades y plazos.
La nueva factoría se añade a la megaplanta de montaje del grupo francés Renault, operativa en Tánger (norte) desde 2012, que produce en el país magrebí el 10 % de los vehículos que vende en todo el mundo.
La planta de Renault ha contribuido en aumentar de forma considerable la oferta exportadora de Marruecos, y vende a 74 países con una capacidad productora de 500.000 vehículos en 2020.
En Marruecos, las ventas de automoción por cuarto año consecutivo son el primer sector exportador en el país magrebí, por delante de los fosfatos.
Desde 2013 y hasta 2018, este sector duplicó sus exportaciones y ha creado un total de 189.600 puestos de trabajo en el país magrebí.