Fráncfort (Alemania), 30 jun (EFECOM).- El Banco de Pagos Internacionales (BPI) valora los esfuerzos de China por reducir el apalancamiento de las empresas y el tamaño del sector de la banca en la sombra.

En su último informe anual, publicado hoy, el BPI analiza los esfuerzos de China para "asegurar una transición suave a una economía basada en los servicios".

El año pasado las autoridades reguladoras chinas aprobaron medidas para "restringir la banca en la sombra" y desapalancar la economía.

Estas medidas redujeron el gasto de gobiernos locales y la actividad de las pymes, que en los últimos diez años dependía de la financiación de la banca en la sombra.

Como resultado bajó con fuerza el capital de trabajo y la rentabilidad de las pymes chinas.

Las medidas adoptadas por las autoridades chinas eran necesarias desde una perspectiva a largo plazo, pero han deprimido la inversión y la actividad económica a corto plazo, según el BPI.

"Las tensiones comerciales exacerbaron estos problemas, especialmente para los sectores orientados a las exportaciones", considera el BPI, que asiste a los 60 bancos centrales y autoridades monetarias de todo el mundo, que son sus accionistas.

La proporción de empresas que han tenido pérdidas en 2018 aumentó y las empresas de pequeña capitalización y las manufactureras son las que más sufrieron.

El efecto es macroeconómicamente significativo: la caída de los beneficios de las empresas más pequeñas recortó 0,2 puntos porcentuales del crecimiento del producto interior bruto (PIB).

Por ello las autoridades chinas han animado a los bancos a aumentar sus préstamos a las pymes.

Las medidas que el Banco Popular de China adoptó desde junio de 2018 incluyen aumentar la cuota refinanciación del banco central y volver a descontar los préstamos a los bancos más pequeños.

Ha incentivado el préstamo a las pymes usando el nivel de ese préstamo como base para bajar los requerimientos de capital y proporcionar acceso a nuevos préstamos del banco central de hasta tres años.

En abril el Gobierno recortó el IVA a bienes del sector manufacturero del 16 hasta el 13 %.