Buenos Aires, 3 jul (EFECOM).- El Gobierno de Argentina atribuyó este miércoles a un error operativo el "inusual" apagón que el pasado 16 de junio dejó sin energía al país, Uruguay y parte de Paraguay, pero aseguró que el sistema eléctrico es "robusto" y negó que el problema se haya debido a falta de inversiones.

Al comparecer ante una comisión del Senado, el secretario de Energía argentino, Gustavo Lopetegui, explicó que el fallo registrado el 16 de junio pasado se debió a un cúmulo de factores, pero se desencadenó con una "omisión operativa" de Transener, la empresa que opera la red de transmisión de electricidad en alta tensión.

El fallo, que ocurrió por la desconexión de una línea de alta tensión y la no reprogramación de un sistema denominado Desconexión Automática de Generación (DAG), se produjo a primera hora de la mañana de un domingo, cuando había baja demanda y una alta oferta de energía, que, cuando el DAG funciona correctamente, se compensan en forma automática.

A ese "error", que generó una "pérdida de sincronismo" entre la oferta y la demanda de electricidad que circula por la red, le siguieron otras conductas inadecuadas, por parte de las generadoras y las distribuidoras de energía, que agravaron la situación y produjeron un "colapso total", afirmó el ministro argentino.

En el caso de las generadoras, precisó que cinco de los 105 rotores de generación se desconectaron de la red de transporte en alta tensión de forma prematura, dejando de aportar energía.

En simultáneo, 69 de las 74 empresas distribuidoras que operan en el país no hicieron el recorte de demanda suficiente al sistema, agravando el "desbalance" en la red y "generando una inestabilidad mucho mayor, intolerable para todo el sistema".

"Estos apagones son inusuales porque tienen que darse la concurrencia de todos estos efectos", señaló Lopetegui ante los miembros de la comisión de Minería, Energía y Combustibles del Senado.

Precisó que, tras este estudio preliminar de lo que ocurrió, el Ente Regulador de Energía (Enre) elaborará un informe final en un plazo de ente 45 días y dos meses y establecerá las sanciones a aplicar.

Lopetegui dijo que el marco de regulación establece que para el caso de Transener, que según el ministro admitió su error operativo, se puede aplicar una multa máxima equivalente al "10 % de la remuneración anual de la empresa".

Transener, cuyas acciones bajaban este miércoles un 0,71 % en la Bolsa de Buenos Aires, está controlada por una sociedad integrada a partes iguales por el grupo privado argentino Pampa Energía y la estatal Integración Energética Argentina (Ieasa).

En tanto, las generadoras podrían ser sancionadas con recortes en sus despachos de energía a la red, lo que reduciría sus ingresos, mientras las distribuidoras pagarían una compensación proporcional a la energía que debieron dejar de demandar y no recortaron.

Tras una extensa explicación técnica del apagón que dejó a Argentina sin luz durante catorce horas, Lopetegui aseguró que sigue "afirmando que el sistema argentino de electricidad es robusto".

Alegó que el nivel de fallos en el transporte se redujo desde la privatización de la red, en 1994, y actualmente -con 60 fallos al año- está por debajo de países como Estados Unidos, Brasil o Chile.

El ministro insistió en que el apagón "no fue un problema estructural" ni tampoco "un problema de falta de inversión", ya que, precisó, los desembolsos de Transener se triplicaron en los últimos dos años con respecto a las inversiones en los catorce años previos.

Ante críticas por la supuesta falta de control, Lopetegui dijo que el Enre vela por el cumplimiento de los contratos de concesión en cuanto a la calidad de servicio y las inversiones pautadas, pero, aclaró, "el Estado en ningún país hace lo que se denomina una vigilancia continua porque es imposible" ya que implicaría "tener casi un empleado detrás de cada empleado" de las empresas.

nk/cjn/mmg