El recibo de la luz se abarata un 4% en agosto tras el repunte de julio
La factura de la luz se abarató cerca del 4 % en agosto con respecto al mes anterior, retomando así la senda de caídas que abandonó en julio, cuando repuntó un 4,1 % tras nueve meses consecutivos a la baja.
Según los datos obtenidos del simulador de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), la factura para un consumidor tipo -con una potencia contratada de 4,4 kilovatios y un consumo anual de 3.000 kilovatios hora (250 KWh al mes)-, acogido a la tarifa regulada o Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor (PVPC), se situó en agosto en 54,2 euros, 2,23 euros más barata que en julio.
Además, si se compara con el mismo mes del pasado año, la factura de la luz para un consumidor medio se abarató en agosto un 13,3 % en tasa interanual.
De hecho, en agosto de 2018 el recibo de la luz ascendió de media a 62,51 euros, lo que supone un importe superior en 8,3 euros al registrado en ese mes de este año.
Asimismo, cabe destacar que 2019 empezó con caídas en el precio medio de la factura de la luz. De hecho, enero comenzó con una ligera bajada del 0,46 % respecto a diciembre de 2018, encadenando su cuarto descenso consecutivo, aunque su importe, 61,77 euros, subió un 5,06 % en términos interanuales.
Los descensos se acentuaron en febrero, con una bajada del precio de la factura del 7,8 % respecto a enero, y un 1,2 % menor que la de hace un año, de acuerdo con el simulador de la CNMC.
En marzo, el último mes en el que estuvo en vigor la suspensión por seis meses del impuesto a la generación, la factura moderó su bajada hasta el 0,4 %, si bien fue un 3,75 % superior a la del mismo mes de 2018.
En abril, el recibo de la luz bajó un 0,28 % intermensual, sumando siete meses consecutivos de descensos de precio tras las medidas adoptadas por el Gobierno en septiembre, cuando la luz alcanzó máximos anuales.
En el caso de mayo, la factura de la luz fue un 1,4 % más barata que la de abril y un 5,3 % más baja que la que se registró en mayo de 2018, cuando repuntó con fuerza e inició una racha de ascensos que se prolongó hasta septiembre incluido, en tanto que en junio la factura de la luz fue un 1,56 % más barata que en mayo.
Tras nueve meses consecutivos con caídas intermensuales, la factura de la luz se encareció en julio un 4,1 % con respecto al mes anterior, aunque fue un 7,4 % más barata que hace un año.