El consejo de administración de Mediaset Italia se ha opuesto este jueves a que el fideicomiso que tiene la mayoría de los derechos de voto de Vivendi, Simon Fiduciaria, pueda votar sobre la fusión con la filial española que se va a votar en Madrid y en Milán y ha vetado su acceso a la reunión.
Así lo ha confirmado el grupo, propiedad de la familia Berlusconi, en un comunicado en el que ha explicado que Vivendi podrá votar con el equivalente al 9,99% de sus derechos de voto directos. El grupo francés tiene el 28,8% de Mediaset Italia, pero solo el 9,99% de derechos de voto directos, pues el resto está en manos del fideicomiso Simon Fiduciaria por orden de los reguladores italianos, que se ampararon en 2017 en preocupaciones antimonopolio ya que también tiene el 23,94% de Telecom Italia.
El grupo de Berlusconi vetó el 18 de abril el derecho de Vivendi de participar en las juntas de accionistas porque consideró que tiene "un comportamiento desleal", después de que se retirara en 2016 de un acuerdo de compra del canal privado Mediaset Premium y se hiciera con un tercio del grupo italiano. Vivendi recurrió esta decisión ante la Justicia italiana, que le ha concedido votar solo por el equivalente al 9,99 %, mientras que no ha admitido los derechos del fideicomiso.
El grupo italiano podría haber admitido a Simon Fiduciaria en la reunión de hoy, pero, como era previsible, se ha opuesto a que participe en la asamblea por su pública oposición a la operación de concentración.
Los accionistas de Mediaset España e Italia votan este miércoles si se fusionan para dar lugar a Media For Europe (MFE), un gigante audiovisual que competirá con plataformas de programación digital en el mundo. Tendrá sede en Holanda y cotizará en Madrid y en Milán. Para que la operación salga adelante, necesita una mayoría de dos tercios de los asistentes en el caso de Mediaset Italia y mayoría simple en España.
En España no se esperan complicaciones, pues el grupo Mediaset controla el 51,6% del capital, y la atención estará en Italia, donde la familia Berlusconi tiene el 44,18% a través de la sociedad Fininvest. Vivendi ya ha adelantado que votará en contra pero, con solo su 9,99%, no podrá poner en riesgo la operación, al menos en este primer estadio.
Podrá jugar otra baza, ya que el grupo Mediaset ha previsto que los accionistas de la matriz italiana que no se sumen a esta operación reciban 2,770 euros por cada acción y 6,5444 euros en el caso de Mediaset España, con la condición de que el efectivo que se les pague no exceda de los 180 millones de euros. Vivendi, con su participación total del 28,8 % del capital de Mediaset Italia, podría ejercer su derecho de oposición y obligar al grupo a pagarle hasta 900 millones de euros, por lo que Mediaset se vería obligado a buscar a otro socio que adquiera estas acciones para poder seguir adelante.