Economía

Inversión, tasas verdes, nuevas cuentas: claves económicas de la próxima CE

3 octubre, 2019 17:29

Bruselas, 3 oct (EFECOM).- La próxima Comisión Europea (CE) quiere dar un impulso a la inversión en la Unión Europea, poner en marcha un seguro de desempleo como parachoques ante futuras crisis, adaptar las normas tributarias a su lucha por el clima y la digitalización y pactar cuanto antes el nuevo presupuesto plurianual "post-brexit".

Así lo han avanzado este jueves el eurocomisario designado para la cartera de Economía y Fiscalidad, el italiano Paolo Gentiloni, y el de Presupuesto, el austríaco Johannes Hahn, durante sus audiencias con la Eurocámara, que debe dar el visto bueno a su nominación.

REPUESTA A LA RALENTIZACIÓN

El exprimer ministro italiano, Paolo Gentiloni, insistió en que la eurozona no puede seguir confiando solo en la política monetaria del Banco Central Europeo para hacer frente a la desaceleración del crecimiento, que podría durar más de lo previsto.

"En esta situación, nuestras políticas económicas deberían estar fuertemente orientadas a favor del crecimiento y de la inversión, y pedir a aquellos que tienen margen fiscal que lo usen para relanzar nuestro crecimiento", afirmó Gentiloni.

El italiano no mencionó a ningún país, pero Bruselas ha pedido reiteradamente a Alemania y Holanda que utilicen sus superávit fiscales para invertir.

Gentiloni insistió en que se necesita "mayor coordinación de las políticas fiscales" nacionales y "poner el foco en la inversión" tras años de austeridad, pero aplicando al mismo tiempo reformas estructurales y sin perder de vista la reducción de la deuda.

En este sentido, aseguró que aplicará las reglas de disciplina fiscal europeas con "flexibilidad" para "fomentar las inversiones necesarias", pero añadió que se centrará en la reducción de la deuda por el "efecto desestabilizador" que puede tener si alcanza niveles muy altos.

NORMAS PRESUPUESTARIAS

Gentiloni aseguró que le gustaría cambiar las reglas europeas de disciplina presupuestaria -el Pacto de Estabilidad y Crecimiento- para hacerlas más simples, fáciles de aplicar y anticíclicas.

Esto significaría permitir medidas de estímulo -como aumentos del gasto público o bajadas de impuestos- en momentos de dificultad, contrariamente a lo que pidió Bruselas durante la crisis financiera de 2008 y defienden Alemania, Holanda o los nórdicos.

"El Pacto evitó una crisis económica mayor y ha sido útil para reducir los déficit públicos, pero no ha tenido suficiente éxito a la hora de reducir los niveles de deuda y facilitar el crecimiento", dijo.

SEGURO DE DESEMPLEO

Gentiloni prometió además que, de ser avalado por la Eurocámara, empezará a trabajar "en las próximas semanas" en un esquema europeo de reaseguro de las prestaciones por paro, que permita complementar los sistemas nacionales cuando un país atraviese una crisis.

Se trataría de una herramienta que permitiría estabilizar la economía, algo que a su juicio es imprescindible pero que, admitió, "no será fácil políticamente".

Este mecanismo podría funcionar proporcionando préstamos o apoyo directo a los presupuestos nacionales, tendría que permitir desembolsos automáticos y no debería constituir un sistema de transferencias permanentes entre países que desaliente a hacer reformas, avanzó.

FISCALIDAD

Gentiloni, también responsable de tributos y aduanas, confirmó que la Comisión propondrá una tasa al carbono en frontera para que las empresas europeas compitan en igualdad de condiciones frente a las importaciones de terceros países, sujetas a menos exigencias de reducción de emisiones.

Asimismo revisará las normas europeas de tributación de la energía para suprimir los subsidios a los combustibles fósiles y se comprometió a resucitar la propuesta de un impuesto europeo a los gigantes digitales si para finales de 2020 no hay una solución global para gravar adecuadamente su actividad.

Por otra parte, insistió en que "no se puede aceptar la competencia fiscal agresiva entre países europeos", que pujan por atraer empresas a base de rebajas impositivas, y afirmó que una posible solución sería establecer un tipo mínimo de impuesto de Sociedades en toda la UE.

PRESUPUESTO

El austríaco Johannes Hahn, que iniciaría su tercera legislatura en la CE pero la primera al frente de Presupuesto, afirmó que su objetivo es tener un acuerdo sobre el marco financiero plurianual 2021-2027 "a finales del invierno" de 2020 y rechazó hablar de un "plan B" si los Estados y el Parlamento no llegan a un consenso.

La base de negociación será la propuesta de la Comisión saliente, aunque Hahn se mostró abierto a modificarla siempre que los fondos no queden "en ningún caso por debajo" de los previstos en la misma.

Este borrador prevé elevarlos del 1 al 1,1 % de la renta nacional bruta, hasta 1.279 billones de euros, para paliar el agujero que dejaría la salida del Reino Unido.

Hahn consideró además "imperativo" poner en marcha el mecanismo que permitiría retirar fondos europeos a los países que tengan problemas con el Estado de Derecho, aunque este, como el resto de aspectos del marco financiero, dependen en gran medida de los países.

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