Las fusiones de nuevo en el punto de mira de la banca ante baja rentabilidad
Madrid, 14 oct (EFECOM).- Los principales banqueros españoles creen más que probable que el sector financiero español siga reduciendo su tamaño a golpe de fusiones, aunque no todos están dispuestos a participar en ellas y consideran que, de momento, no saldrían de nuestras fronteras, es decir, no serían paneuropeas.
Los representantes del sector se han expresado de esta forma en el X Encuentro del Sector Financiero, organizado por KPMG, Expansión, Microsoft y American Express, en el que también han participado la ministra de Economía en funciones, Nadia Calviño, el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, y el vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), Luis de Guindos.
Calviño ha anunciado que remitirá mañana a Bruselas el nuevo cuadro macro y ha reafirmado que las tendencias y las perspectivas de la economía española son positivas, aunque no es momento de complacencias y menos de experimentos.
Sobre la sentencia del procés, conocida esta mañana, ha confiado en que abra una nueva fase que permita que Cataluña "juegue el papel que debe como uno de los motores económicos de nuestro país", y ha asegurado que el Gobierno acata la decisión judicial y tiene un respeto "escrupuloso" por la independencia del poder judicial" y por la sentencia, que tiene que ser "ejecutada, respetada y puesta en valor".
El vicepresidente del BCE, Luis de Guindos, ha descartado que la zona euro "esté abocada" a una recesión, aunque ha reconocido que hay riesgos que pueden provocar que el crecimiento sea reducido y que se sitúe por debajo de su potencial "durante un periodo dilatado".
Estos riesgos exigen una combinación de políticas económicas, como reformas estructurales, una política fiscal "agregada" y la culminación de la unión bancaria y del mercado de capitales, ha dicho De Guindos, que también se ha mostrado convencido de que habrá una nueva oleada de fusiones en el sector financiero.
Por su parte, el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, ha considerado que el actual contexto de "menor dinamismo económico" hace "más probable" que se prolongue el período de bajos tipos de interés, con lo que la rentabilidad de la banca se verá sometida a una presión a la baja "adicional".
En este contexto, ha añadido, "sería deseable que, tras las elecciones, se formara un Gobierno estable que redujera la incertidumbre sobre el futuro de las políticas económicas, diera un nuevo impulso a las reformas estructurales y retomara el proceso de consolidación fiscal".
El presidente del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria, FROB, Jaime Ponce, se ha mostrado a favor de no relajar los requerimientos regulatorios del sector financiero, ya que, según ha advertido, mitigarlos "sería olvidar rápidamente cuál fueron las consecuencias" pasadas.
El consejero delegado del Banco Santander, José Antonio Álvarez, cree que podría haber un nuevo proceso de consolidación en España, aunque ha descartado que la entidad vaya a participar.
Más decidido, el consejero delegado de BBVA, Onur Genç, no ha tenido problemas en reconocer que ellos sí podrían participar en alguna operación de este tipo "si surge una buena oportunidad", aunque ahora están muy centrados en transformación digital, que está muy avanzada.
El presidente de CaixaBank, Jordi Gual, también está de acuerdo en que aún hay algo de recorrido para más uniones en el sector financiero español, aunque, de momento, no serían paneuropeas, como desearían las autoridades comunitarias por razones "regulatorias".
El consejero delegado de Bankia, José Sevilla, ha considerado que las fusiones bancarias tienen "más sentido" en el entorno actual de tipos de interés negativos, en algunos casos para ahorrar costes, y ha recordado que la entidad "predica con el ejemplo" al haber participado en la unión con BME.
Otro ejecutivo que tiene claro que habrá fusiones es el consejero delegado del Banco Sabadell, Jaime Guardiola, que ha precisado que ellos podrían participar "tanto como entidad activa como pasiva", y ha recordado que ahora "los tamaños importan".