Grupo italoestadounidense se adjudica primera lotería privatizada de Brasil
Río de Janeiro, 22 oct (EFECOM).- Un consorcio integrado por dos gigantes de los juegos de azar, la italiana IGT y la estadounidense SGI, se adjudicó este martes, en una subasta organizada por el Gobierno y en la que fue el único grupo en hacer propuestas, los derechos para operar la primera lotería privatizada en Brasil.
El consorcio Estrela Instantánea tendrá la concesión para operar por 15 años la Lotería Instantánea Exclusiva (Lotex), un sistema de lotería de "raspe y gane" actualmente administrado por el banco estatal Caixa Económica Federal, tras comprometerse a pagar 817,9 millones de reales (unos 204,475 millones de dólares) por la licencia.
El vencedor tendrá que pagar un valor inicial de 96,9 millones de reales (unos 24,2 millones de dólares) y, a partir del próximo año, siete cuotas anuales de 103 millones de reales (unos 25,7 millones de dólares).
El consorcio estadounidense-italiano ofreció como pago inicial, criterio para definir al vencedor, 96,969 millones de reales, un valor tan solo en 1.000 reales (250 dólares) superior al exigido como mínimo por el Gobierno (96,968 millones de reales).
Se trata de la primera lotería privatizada por el Gobierno de Brasil, país en donde el juego (bingos y casinos) es prohibido y en el que las loterías eran un monopolio de la Caixa Económica Federal, que cuenta con media docena de sistemas de apuestas.
La Lotex fue incluida en el plan de privatizaciones en 2016 por el gobierno del entonces presidente Michel Temer pero el proceso se arrastró tres años por la falta de interesados debido a las exigentes reglas iniciales.
Tras un primer intento de privatización realizado en junio del año pasado y otro en mayo de este año en el que no aparecieron interesados, el Gobierno del presidente Jair Bolsonaro flexibilizó las normas, dobló el número de cuotas que tiene que pagar el vencedor (de cuatro a ocho) y redujo las exigencias sobre el tamaño de los competidores.
Inicialmente exigía que las interesadas tenían que ser empresas con ingresos de al menos 400 millones de reales anuales como operadoras de loterías semejantes y ese valor quedó reducido a 140 millones de dólares.
El consorcio vencedor está integrado por la International Game Techology (IGT), una empresa italiana con sede en Londres que produce tecnologías para máquinas de apuestas y por la estadounidense Scientific Game International (SGI), otra multinacional de los juegos de azar.
Ambas tienen en conjunto el 80 % de la participación en el mercado de loterías instantáneas en el mundo, que es calculado en 80.000 millones de dólares, según afirmó Roberto Quattrini, representante del consorcio.