El salario medio mensual, en términos brutos, alcanzó los 1.944,4 euros en 2018, lo que supone un 2,9% más que en 2017, su mayor aumento en diez años, según el decil de salarios que elabora el Instituto Nacional de Estadística (INE) a partir de los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA).
Es el segundo año consecutivo en el que se incrementa el salario medio después de que en 2016 bajara por primera vez en diez años.
Según los datos del INE, el 30% de los asalariados (4,8 millones) ganaron menos de 1.260,9 euros brutos al mes en 2018, mientras que el 40% (6,4 millones) obtuvo remuneraciones de entre 1.260,9 y 2.187,2 euros brutos mensuales y el 30% restante (4,8 millones de asalariados) cobró un sueldo superior a 2.187,2 euros al mes,
De acuerdo con esta estadística, un total de 3,2 millones de asalariados (el 20%) ganaron menos de 1.046,9 euros brutos al mes durante el año 2018. De ellos, en torno a 1,62 millones de trabajadores ganaron menos de 748,7 euros mensuales.
Por sexos, el 15,6% de las mujeres ganaron menos de 748,7 euros brutos mensuales el año pasado y el 13,5% percibió un sueldo bruto de entre 748,7 y 1.046,9 euros al mes. En los hombres, estos porcentajes descienden hasta el 4,8% y el 6,7%, respectivamente.
Para elaborar esta estadística, el INE ordena a todos los asalariados --16.215.800 personas durante el pasado año-- según la cuantía del salario mensual percibido y los divide en 10 grupos iguales, con el 10% de los trabajadores en cada grupo.
Como resultado, el salario mediano, que divide al total de los trabajadores en dos partes iguales, los que tienen un salario superior y los que tienen un salario inferior, se situó en 2018 en 1.642,3 euros brutos mensuales, un 3,2% más que en 2017 (52 euros más). Este salario mediano es más de 300 euros inferior al salario medio de 2018 (1.944,4 euros).
Con el avance registrado en 2018, el salario mediano pone fin a tres años consecutivos de descensos. En 2013, el salario mediano era de 1.600 euros brutos al mes y escaló en 2014 hasta los 1.602,5 euros. En 2015 la tendencia se invirtió y se situó por debajo de los 1.600 euros brutos al mes hasta 2017.
Atendiendo al tipo de jornada, el 35,6% de los asalariados a jornada completa ganó al menos 2.187,2 euros mensuales en 2018 y el 18,6% percibió menos de 1.260,9 euros. Por el contrario, el 88,8% de los asalariados a tiempo parcial ganó menos de 1.260,9 euros mensuales y sólo el 1,3% cobró 2.187,2 euros o más.
El salario medio bruto de los trabajadores a jornada completa alcanzó los 2.177,1 euros mensuales, casi tres veces más que los asalariados a jornada parcial (746,1 euros), aunque en estas diferencias debe tenerse en cuenta la brecha de horas trabajadas entre ambos grupos.
Según los datos del INE, las mujeres, los jóvenes, las personas con un menor nivel de formación, los trabajadores con menor antigüedad en las empresas y los contratados temporalmente presentan los salarios más bajos.
En las mujeres, cuatro de cada diez percibió un sueldo inferior a 1.260,9 euros mensuales, frente a dos de cada diez varones. Entre los jóvenes menores de 25 años, la mitad ganó menos de 1.046,9 euros brutos al mes en 2018 y el 65% cobró menos de 1.260,9 euros.
El salario medio femenino se situó en 1.708,4 euros mensuales en 2018, por encima de los 1.668,7 euros de 2017, mientras que el salario medio de los hombres aumentó en 2018 hasta los 2.161,3 euros mensuales. De este modo, el sueldo medio masculino es un 26,5% superior al femenino, diferencia que se ha ampliado respecto a 2017, cuando esta brecha era del 25,3%.
Una de las razones que, según Estadística, explican las diferencias salariales por sexos es que las mujeres trabajan en mayor proporción que los varones en empleos a tiempo parcial, con contratos temporales, y en ramas de actividad peor remuneradas.
También existen brechas salariales según la edad y el tipo de contrato. Así, el sueldo medio de los jóvenes de entre 16 y 24 años se situó en 2018 en 1.091,7 euros mensuales, menos de la mitad de lo que cobraron, de media, los asalariados de 55 y más años (2.205,6 euros). En los jóvenes menores de 25 años, el porcentaje que cobra menos de 1.260,9 euros al mes alcanza el 65% (en los asalariados de 55 y más años el porcentaje baja al 24,1%).
Por tipo de contrato, el sueldo medio mensual de los indefinidos (2.142,2 euros en 2018) supera en un 54,1% al de los temporales (1.389,7 euros). El 48,5% de los asalariados con contrato temporal ganaron menos de 1.260,9 euros en 2018, frente al 23,4% de los indefinidos que se encontraban en esta misma situación.
Entre los factores que explican esta desigualdad salarial entre temporales y fijos, el INE menciona el nivel educativo más alto de los contratados indefinidos y el mayor peso de los contratos temporales en ramas de actividad "con marcado carácter estacional" y remuneración más baja.
Por nivel de formación, el salario medio de los asalariados con educación secundaria de primera etapa (1.276,3 euros mensuales) es bastante inferior al de los que tienen estudios superiores (2.455,3 euros), mientras que, por antigüedad, los que llevan diez o más años trabajando en una empresa cobran de media casi el doble que los que llevan menos de un año (2.448,4 euros frente a 1.343,7 euros).
Los salarios más bajos se concentraron en 2018 en las actividades de los hogares como empleadores de personal doméstico (86% por debajo de 1.260,9 euros) y la agricultura, ganadería y pesca (62,4%). Según el INE, esto se debe en parte a la mayor proporción de empleos a tiempo parcial en el primer sector y a la temporalidad en el segundo caso.
Por el contrario, las remuneraciones más elevadas se dieron en el suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado, donde el 68,8% recibieron salarios superiores a 2.187,2 euros, seguidos de los actividades financieras y de seguros (66,5%) y de quienes trabajan en la Educación (61,1%).
Los salarios medios más bajos en 2018 se dieron en las actividades de los hogares como empleadores de personal doméstico (750,2 euros brutos mensuales), en hostelería (1.235,1 euros) y en la agricultura (1.249,8 euros), y los más altos correspondieron a las actividades financieras y de seguros (3.633,5 euros brutos al mes), actividades financieras y de seguros (3.350,6 euros) e información y comunicaciones (2.741,6 euros).
La estadística del INE también distingue entre salarios públicos y privados. En este punto, señala que el 61,8% de los trabajadores del sector público tuvieron un salario bruto mensual de al menos 2.187,2 euros en 2018, porcentaje que desciende hasta el 22,3% en el sector privado.
El INE subraya que esta mayor concentración de salarios altos en el sector público se debe al mayor porcentaje de asalariados con estudios superiores, el tipo de ocupación desempeñado, el menor peso del trabajo a tiempo parcial y la mayor antigüedad.
Así, el sueldo medio bruto en el sector público alcanzó los 2.654,4 euros mensuales el año pasado, frente a los 1.772 euros del sector privado. El primero ha aumentado un 2,1% respecto a 2017, mientras que el salario medio del sector privado creció a un ritmo superior, del 3%. En comparación, los empleados públicos ganan de media casi un 50% más que los asalariados del sector privado.
Analizando los datos por regiones, las que presentaron los sueldos medios más altos fueron, como es habitual, Madrid (2.264,6 euros), País Vasco (2.241,8 euros) y Cataluña (2.067,6 euros), en tanto que Extremadura (1.612,3 euros), Canarias (1.679,3 euros) y Andalucía (1.749 euros) registraron los más bajos.