La agencia de calificación Fitch considera que la industria del seguro goza de buena salud en España, con una "fuerte" situación crediticia, robusta capitalización y posibilidades de crecer aún más, sobre todo en el ramo vida.

Fitch destaca en un informe remitido este jueves que el RoE (indicador para valorar la rentabilidad del capital) medio de los últimos diez años de las aseguradoras es del 13% y que el sector aún tiene oportunidades de crecer, sobre todo en el ramo de vida.

No obstante, los bajos tipos de interés han afectado a su desarrollo, por lo que el indicador de rentabilidad se redujo al 11% en 2018.

La agencia espera que el ramo de no vida siga creciendo lo mismo o ligeramente más que el PIB en 2019 y 2020, aunque se ralentizará respecto al ritmo de los años anteriores debido a las previsiones de desaceleración del consumo privado.

El seguro de automóviles es la mayor línea de negocio del segmento en España, con un 32% de las primas de ese ramo, pese a que la crisis de los años 2008-2013 se dejó sentir con fuerza en el sector debido a la caída en las ventas y el menor uso del vehículo privado.

En cuanto a su rentabilidad, Fitch no espera que las primas crezcan significativamente debido a la "intensa" competencia entre los aseguradores de motor y por el aumento de las reclamaciones de clientes.

Las previsiones para el segmento de vida son positivas pero el ramo sufrirá una mayor presión, ya que al ser distribuidos por bancos en su mayoría (un 67% frente a un 15% que venden los agentes y un 7%, los brókers) las primas recaudadas pueden ser más volátiles.

Asimismo, Fitch ve al sector asegurador español fuertemente capitalizado, apoyado por la habilidad de las aseguradoras para generar beneficios y recuerda que el ratio de cobertura en España es del 239%, según datos de la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones (DGSFP).