Economía

Italia decidirá su postura en la reforma del MEDE el 11 de diciembre

2 diciembre, 2019 19:46

Roma, 2 dic (EFECOM).- El Parlamento italiano votará el próximo 11 de diciembre la postura oficial del país en la reforma del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) que debe ser aprobada por los socios de la Unión Europea (UE), después de que el Gobierno no logre encontrar una línea común.

El Movimiento 5 Estrellas (M5S) y el Partido Demócrata (PD), socios en el Ejecutivo, mantienen posturas diferentes en torno a la necesidad de reformar el MEDE y las discrepancias se han incrementado después de que la ultraderechista Liga, de Matteo Salvini, haya acusado en los últimos días al Gobierno de perjudicar a los italianos con esta medida.

Una reforma que precisamente fue negociada en junio, cuando dirigían el país el M5S y la Liga, que ahora muestran sus reticencias.

"Desde hace algunas semanas, los principales representantes de algunas fuerzas de oposición han llevado a cabo una campaña mediática insistente y generalizada, acusándome de una conducta impropia en las negociaciones con la UE y responsable de una alta traición", lamentó este lunes el primer ministro, Giuseppe Conte, en una comparecencia ante el Parlamento.

El Gobierno italiano no acuerda una posición común, pues el PD está a favor de la reforma y el M5S quiere que se solicite a Bruselas la mejora de "todo el paquete de reformas" de la Unión Económica y Monetaria.

Debido a la polémica que esta medida ha levantado recientemente en el país, el Ejecutivo ha decidido que sea el Parlamento quien se pronuncie el 11 de diciembre, un plazo que permitirá al mismo tiempo a las fuerzas que dirigen el país tratar de acercar posturas.

El líder del M5S y ministro de Desarrollo Económico, Luigi Di Maio, ha recordado que su formación siempre se ha mostrado preocupada por el MEDE y cualquier política que afecte al sistema bancario y ha declarado que "no es extraño que dos fuerzas gubernamentales tengan opiniones diferentes".

La reforma del MEDE le otorgará más poder en futuros rescates y en la vigilancia económica de los Estados en cooperación con la Comisión Europea.

La intención es que sea responsable del cortafuegos del Fondo Único de Resolución bancaria (FUR) y que complete la financiación con la que cuenta el FUR para que en el caso de una crisis bancaria de gran envergadura que requiera la intervención de los países miembros haya dinero suficiente, aunque se agote el del fondo.

Está previsto que los Estados miembros aprueben en diciembre esta reforma y debatan si vincular los futuros rescates a una reestructuración de la deuda del país necesitado, para lo que se introducirían cláusulas que facilitarían que los acreedores privados asumieran pérdidas en caso de quiebra.