Madrid, 3 dic (EFECOM).- El consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, teme que la regulación a los nuevos competidores tecnológicos de la banca tardará en endurecerse y no se igualará a la del sector financiero hasta que haya un jugador "muy grande".

El banquero defiende la idea del resto de sus colegas que la misma actividad debe estar sujeta a las mismas reglas de juego, pero considera que "las cosas no van a cambiar hasta que haya un player muy grande".

A modo de ejemplo, ha dicho, sólo cuando Facebook anunció el lanzamiento de Libra, su criptomoneda, los reguladores y supervisores entendieron que se había cruzado una línea y reaccionaron.

Por eso piensa que, mientras los nuevos competidores se dedican solo a determinadas actividades, la regulación tardará en endurecerse y mientras tanto los bancos tienen que seguir dando confianza a sus clientes sobre la gestión del dinero.

Además, durante su intervención en el XV Encuentro del Sector Financiero del IESE, Gortázar ha insistido en que los bancos españoles pagan muchos impuestos en el país, algo que la sociedad tendría que valorar, frente a los grandes gigantes tecnológicos que no se sabe bien dónde tributan.

En el caso de las "fintech", sin embargo, el número dos de CaixaBank es más partidario de la colaboración porque este tipo de empresas emergentes tienen "muy complicado" captar clientes, algo que tiene la banca, además de una plantilla que es una gran ventaja para dar valor añadido.

Por eso sostiene que, si CaixaBank y el resto de los bancos son capaces de adaptar su oferta de servicios y avanzar en el mundo digital, tendrán ventajas frente a las grandes tecnológicas.