Madrid, 13 dic (EFECOM).- Los coches de nueva generación, conectados, enchufables o los futuros autónomos, dispondrán de líneas de software cuatro veces mayor que las de un avión, según un estudio de la Asociación Europea de Proveedores de Automoción (Clepa).
La secretaria general de Clepa, Sigrid de Vries, ha solicitado este viernes en la jornada "Proveedores en movimiento. Visión de futuro" de la Cop25 organizada por Industria y Sernauto un "marco legal europeo para la innovación" en el sector de la automoción.
Según De Vries, China y Estados Unidos "están intentando aportar esas tecnologías vitales" para los vehículos electrificados y ha opinado que Bruselas "tiene un papel clave que desempeñar".
La secretaria general de la asociación europea del sector ha apuntado que es "necesario" ese marco legal que "fije objetivos, prioridades y ayudas para una transición racional", que debe incluir "medias que compensen" las inversiones y su efecto en el empleo.
Para Sigrid de Vries, la combustión "no es una tecnología antigua" y ha agregado que el coche eléctrico "es una gran solución pero no la única".
Ha subrayado la importancia de que Europa mantenga su competitividad en los mercados globales.
Un informe presentado en la misma jornada sobre la electrificación de vehículos presentado por la Asociación Española de Proveedores de Automoción (Sernauto), destaca que la penetración del coche eléctrico en el parque móvil en un 50 % para 2030 como pretende la UE "es casi un milagro".
El estudio aclara que la electrificación no es más que "el primer paso para una transformación mucho mayor".
"Después" -prosigue- "vendrá la conducción autónoma y la digitalización, que es en lo que las compañías están intentando avanzar".
Sobre las amenazas que se ciernen sobre España en cuanto a la electrificación de la movilidad, el estudio resalta que "no tiene la posibilidad" del diseño de los principales modelos de cada marca "porque se ejecuta en los países de origen".
Además, hace hincapié en que en España "no hay suficiente" infraestructura para impulsar el vehículo eléctrico ni capacidad para acometer inversiones.
Indica que la actual cuota de mercado del coche eléctrico es "muy baja con respecto a otros mercados", que el estudio cifra en el 0,9 %, y que existen "solo" 0,3 estaciones de carga eléctrica activas por cada 100 kilómetros.