Argentina y Brasil establecen una "línea directa" en relaciones comerciales
Buenos Aires, 26 dic (EFECOM).- Los ministros de Exteriores de Argentina, Felipe Solá, y Brasil, Ernesto Araújo, acordaron este jueves en una extensa conversación establecer una "línea directa" para tratar políticas comunes sobre las relaciones comerciales entre ambos países, informaron fuentes oficiales.
"La relación entre Argentina y Brasil es entre dos países hermanos que históricamente han sostenido relaciones comerciales, culturales y políticas fructíferas", expresó el canciller argentino en una teleconferencia con Araújo que duró hora y media.
Desde el Ministerio de Exteriores, Comercio Internacional y Culto argentino indicaron en un comunicado que Araújo invitó a Brasilia a Solá, quien viajará al país vecino el próximo 31 de enero.
Brasil es el principal socio comercial de Argentina, pero la relación entre ambas naciones se tornó tensa tras la victoria en las elecciones de este último país del peronista Alberto Fernández, con quien el mandatario brasileño, el ultraderechista Jair Bolsonaro, tiene profundas diferencias ideológicas.
Tras conocer los resultados de los comicios, Bolsonaro expresó que Argentina hizo una "mala elección", no acudió a la asunción presidencial de Fernández el pasado 10 de diciembre y finalmente envió a su vicepresidente, Hamilton Mourao.
Ese mismo día moderó el tono de sus declaraciones y expresó su deseo de que el peronista "acierte" en la dirección de Argentina.
Mientras tanto, en su discurso de investidura Fernández hizo un llamamiento a la "hermandad" con Brasil y expresó su voluntad de dejar a un lado la "diferencia personal" con el presidente brasileño.
Los cancilleres coincidieron en la necesidad de darle importancia a la participación de los sectores privados en las negociaciones comerciales entre ambos países y en potenciar al Mercosur -bloque comercial integrado por Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay- como un espacio que debe seguir siendo primordial.
En esta línea, el gobernante brasileño dijo que su país estaba dispuesto a aprobar el acuerdo de libre comercio firmado en junio entre el Mercosur la Unión Europea, que todavía no entró en vigor ya que tiene que ser ratificado en los Parlamentos de los países miembros.
Por su parte, Solá ató este punto al impacto sobre la industria argentina y la opinión de los empresarios y trabajadores.