El sector del automóvil vive uno de los momentos históricos más complejos. Un gran número de factores internos y externos ha provocado una tormenta perfecta que sacude con especial fuerza a Europa y España en concreto.
Resulta paradójico que el precio de los automóviles registrara un incremento interanual del 1,4% durante el pasado marzo, según datos que ha publicado este miércoles el Instituto Nacional de Estadística (INE). Este porcentaje significa que se mantiene en su mayor nivel desde septiembre de 2017, cuando el crecimiento fue del 1,6%.
Por su parte, las piezas de repuesto se encarecieron un 0,8% interanual y un 0,4% desde principios de año, aunque no sufrieron variación en términos intermensuales, mientras que los precios de los carburantes se desplomaron un 7,4% frente a marzo de 2019, un 7,6% en la comparativa mensual y un 8,4% en el acumulado del año.
Los servicios de mantenimiento y reparación de vehículos contabilizaron un aumento de precio interanual en marzo del 1,5% con respecto al mismo periodo del ejercicio anterior. La variación mensual arrojó una subida de dos décimas y el aumento desde enero fue del 0,9%.
Por qué sube el precio
Les puede resultar contradictorio que los precios de coches suban mientras las ventas no paran de caer. Tiene su explicación. Por un lado, hay un cambio de gustos en la sociedad. No hay más que mirar el parque móvil español para comprobar el creciente interés por los vehículos SUV y modelos todoterreno, por lo general más caros que los compactos o berlinas.
Por otro lado, la entrada en vigor de la nueva normativa europea de emisiones. Este hecho ha provocado que las marcas tengas que hacer una ingente inversión en motores más eficientes, con la consiguiente repercusión en el precio final del vehículo.
Las ventas, por los suelos
Los fabricantes del vehículos ven cómo la sociedad demanda vehículos grandes, con espacio, eficientes, potentes y con la última tecnología mientras las cifras de ventas se hunden mes tras mes.
Marzo ha sido la puntilla. Las matriculaciones de turismos y todoterrenos en España alcanzaron un volumen de 37.644 unidades el mes pasado, lo que supuso un desplome del 69,3%. El primer trimestre cerró con un retroceso un 31%.
Por ese motivo, el sector español del automóvil ha solicitado al Gobierno un plan de choque nacional de medidas urgentes y específicas para el automóvil y otros vehículos, como vehículos industriales, autobuses, motocicletas o ciclomotores.
Con las plantas de producción que vuelven al trabajo paulatinamente, los concesionarios cerrados, la movilidad reducida a mínimos históricos y los precios medios en máximos, este sector se enfrenta a un futuro incierto.
Noticias relacionadas
- El IPC cae más de lo esperado: marca mínimos desde 2016 tras bajar 7 décimas en marzo
- El sector del automóvil pide auxilio al Gobierno con un plan de choque nacional
- Los concesionarios pierden ya 45.000 matriculaciones desde el inicio de la crisis
- Renault vende a Dongfeng su participación en la 'joint venture' para reorientar su negocio