El pago del impuesto sobre sociedades en todo el mundo supuso 15.017 millones de euros a las 112 multinacionales españolas que en 2017 contaban con una facturación anual de más de 750 millones. Esa cuantía representó el 17% de su beneficio global, que alcanzó los 88.398 millones de euros.
Medido en términos de devengo, el impuesto alcanzó un total de 14.786 millones para estos grupos, un 16,7% del beneficio. El análisis efectuado por la Agencia Tributaria, ofrece de forma agregada la información de los 112 mayores grupos de matriz española y sus 14.996 filiales, de ellas 9.939 extranjeras. Estas multinacionales conjuntamente sumaron una facturación mundial de 806.441 millones de euros en 2017.
Un impuesto que según se recoge en los nuevos Presupuestos Generales del Estado, que entraron en vigor el pasado 1 de enero, sufrió un incremento del 2,5% al 3,5%. Una decisión que no sentó nada bien a la patronal, que se reunió con el defensor del Pueblo para instarle a recurrir la subida.
Los datos figuran en la segunda edición del análisis anual que elabora la Agencia Tributaria a partir de la información suministrada por las empresas a través del modelo 231 de declaración de información ‘País por país’ (CBC por sus siglas en inglés), declaración que tiene por objeto recopilar datos agregados del colectivo para el intercambio de información entre administraciones tributarias que se establece en los acuerdos ‘BEPS’ (‘Erosión de Bases y Traslado de Beneficios’) de la OCDE.
El objetivo del CBC es recopilar datos agregados y anonimizados de este colectivo de grandes multinacionales para el intercambio de información establecido en las acciones 11 y 13 de los ‘Acuerdos BEPS’, de manera que se proporcione a los Estados una perspectiva global de la actividad intragrupo de sus mayores multinacionales.
Distribución por tramos
La segunda edición de esta estadística vuelve a mostrar una gran dispersión de tipos efectivos sobre beneficios. De acuerdo con los datos suministrados por las propias empresas en sus CBC, las 57 empresas con los tipos efectivos de tributaciones más bajos únicamente representaron el 17,6% del impuesto pagado por el conjunto del colectivo, a pesar de concentrar el 50% del beneficio.
El análisis del CBC se efectúa también en términos de impuesto devengado. Los impuestos devengados y los pagados no coinciden debido a que el criterio de cómputo es diferente.
En devengo, el impuesto será la cuota líquida del ejercicio fiscal 2017, formada por la suma de los pagos fraccionados y la cuota diferencial del mismo año fiscal 2017. En cambio, el impuesto "pagado" es la combinación de los pagos fraccionados de 2017 y la cuota diferencial de 2016. Esta diferencia hace que, por ejemplo, los créditos fiscales aplicados que se incluyen en uno u otro concepto (devengado y pagado), resulten diferentes.
Diferencias con las estadísticas españolas
El estudio sobre el CBC complementa la información que viene publicando la Agencia sobre los datos declarados en Sociedades por las empresas individuales y los grupos consolidados españoles.
La principal diferencia estriba en el concepto de ‘beneficio’ que recoge el CBC y el que figura en las Cuentas Anuales Consolidadas de Sociedades que publica la Agencia. En el CBC se hace referencia a un beneficio neto; es decir, una vez descontadas las pérdidas de todas las filiales de un grupo en una misma jurisdicción fiscal.
En cambio, en las Cuentas Anuales se toma como referencia el beneficio bruto (no considera las pérdidas), que se entiende como una magnitud más precisa y cercana a la filosofía de un impuesto que sólo pretende gravar los resultados positivos.
Al tomarse en el CBC los beneficios netos, descontando las pérdidas, los tipos impositivos resultantes son superiores a los que se obtendrían si el CBC incluyera el beneficio bruto.
En el caso de las empresas globalizadas la información presentada no era completa al no disponerse todavía de información sobre su tributación en el resto de los países. Con este análisis del CBC se completa la información puesto que se publican los impuestos devengados y los que se consideran pagados por los grandes grupos españoles en todo el mundo gracias a la declaración ‘País por país’.