Dos filetes de carne de vacuno.
Garzón estudiará que la carne de ganadería extensiva tenga un etiquetado para distinguirla de macrogranjas
El ministro cree que los consumidores "tienen derecho a saber con la mayor precisión posible de dónde proceden los productos que están consumiendo".
13 enero, 2022 14:48Noticias relacionadas
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El ministro de Consumo, Alberto Garzón, va a estudiar la creación de un etiquetado de la carne de ganadería extensiva para diferenciarla de la procedente de macrogranjas o explotaciones en régimen intensivo.
En una reunión este jueves con representantes de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA), el ministro ha afirmado que estudiará las propuestas recibidas en este sentido porque los consumidores "tienen derecho a saber con la mayor precisión posible de dónde proceden los productos que están consumiendo".
En concreto, ha considerado como "muy importante" que los consumidores cuenten con herramientas necesarias para saber "diferenciar qué productos proceden de las macrogranjas" y cuáles no.
UPA le hizo llegar al ministro una carta hace unos días en la que le invitaba a mantener esta reunión y se mostró partidaria de crear un "sello de calidad" de la ganadería familiar.
Otras iniciativas similares son la promovida en Change.org, donde una petición con más de 55.000 firmas pide un etiquetado claro de la carne, o la que ganaderos de la Sierra Norte de Sevilla le propusieron al ministro por carta.
Puestos de trabajo y arraigo
El ministro ha calificado como "fructífera y productiva" la reunión con UPA. En esta cita también han intercambiado reflexiones sobre los problemas del mundo rural y, en particular, del sector ganadero, según han informado en un comunicado desde el Ministerio.
En este contexto, el ministro ha defendido la ganadería extensiva, familiar y social "que genera puestos trabajos y produce arraigo en la población", frente al modelo de las macrogranjas, es decir, "explotaciones que es necesario frenar y limitar para proteger el planeta, el mundo rural y la ganadería".
Garzón también ha reivindicado "todas las reformas que ha hecho el Gobierno de España para proteger a este sector". Por ejemplo, el real decreto de flexibilización del paquete higiénico-sanitario y que facilita la comercialización a los pequeños productores.
"La ganadería social y familiar representa a gran parte del sector y tiene que ser defendida frente a amenazas como las macrogranjas. Siempre hemos señalado, en línea con los mandatos de la Comisión Europea y en línea con la evidencia científica, el enorme coste social, ecológico y económico que produce este modelo de producción", ha recalcado el ministro.
