La Oficina de Estadísticas Laborales (BEA) ha confirmado este jueves el crecimiento del 2,1% del PIB en el segundo trimestre. Así, la economía de Estados Unidos creció medio punto.
Si se compara con la evolución del primer trimestre, los datos del PIB entre abril y junio reflejan sobre todo una desaceleración en el consumo de los hogares y de las exportaciones así como en el gasto público, mientras subió la inversión privada no residencial y decreció la residencial.
Los datos de la evolución económica se conocen ocho días después de que la Reserva Federal decidiese hacer una pausa en las subidas de tipos de interés, tras las once alzas que ha realizado desde marzo del año pasado, aunque no aclaró si va a haber más incrementos antes de fin de año.
Tipos de interés
"El Comité estaría dispuesto a ajustar la postura de la política monetaria según corresponda si surgen riesgos que pueden impedir la consecución de sus objetivos", apuntó el banco central estadounidense, que decidió mantener los tipos en la horquilla actual del 5,25% y el 5,5%, su máximo nivel desde 2001.
Aunque la bajada de la inflación es el principal objetivo de la política monetaria, el presidente de la Fed, Jerome Powell, ha dejado siempre claro, y así lo hizo la semana pasada, que este organismo se fijará en todos los datos disponibles, incluida la evolución económica y del empleo, para tomar sus decisiones.
"Seguiremos tomando nuestras decisiones según la totalidad de la información entrante y sus implicaciones para las perspectivas de la actividad económica y la inflación. (...) Restaurar la estabilidad de los precios es esencial para sentar las bases para lograr el máximo empleo y precios estables a largo plazo", recalcó Powell.
Otro de los datos en los que se fija la Fed es la evolución del mercado laboral, que también se está ralentizando.
Y es que según la Oficina de Estadísticas Laborales, en agosto la tasa de desempleo en Estados Unidos subió tres décimas en agosto y se situó en el 3,8%.
La creación neta de nuevos puestos de trabajo se mantuvo ese mes en una cifra similar a la registrada en julio, 187.000 puestos, dato que está por debajo de la media de los últimos doce meses, 271.000, y que confirma la ralentización del mercado laboral como consecuencia de las subidas de tipos de interés.