Yolanda Díaz y los presidentes de CEOE, Cepyme y ATA.

Yolanda Díaz y los presidentes de CEOE, Cepyme y ATA. EE

Economía

La productividad crece un 1,2% pero empresas y expertos rechazan que justifique reducir la jornada laboral

El aumento de la productividad por hora no implica que la reducción de las horas trabajadas por ocupado haya estado detrás.

26 junio, 2024 02:41

Los buenos datos del Producto Interior Bruto (PIB) del primer trimestre, con un crecimiento económico del 0,8%, no son suficientes. Pese a que la productividad por hora trabajada ha aumentado un 1,2% respecto al mismo periodo del año pasado, empresarios y expertos coinciden en señalar que no justifica una reducción de la jornada laboral como la que pretende el Gobierno.

Lo cierto es que desde el comienzo de la legislatura, los responsables del Ministerio de Trabajo han asegurado que la reducción de la jornada laboral ayudará con el grave problema de la productividad. La tesis es sencilla: aunque se recorte el tiempo de trabajo, se producirá la misma riqueza, luego el empleo será más productivo. El mantra es que jornadas tan largas como las españolas no son eficientes.

Y lo cierto es que los datos de la Contabilidad Nacional que elabora el Instituto Nacional de Estadística (INE) respaldan en parte esa tesis. La productividad por hora trabajada creció en el primer trimestre ese 1,2% respecto al mismo periodo de 2023, al tiempo que la productividad por puesto de trabajo a jornada completa cayó un 0,8%.

Sin embargo, esto no significa que la eficiencia disminuya según aumenta la jornada laboral, ni tampoco que aumente en caso contrario. Además, y como evidencia el gráfico anterior, la evolución de la productividad en los últimos años no ha sido especialmente dinámica.

María Jesús Fernández, economista senior de Funcas, señala a EL ESPAÑOL-Invertia que si bien el número de ocupados ha crecido, la cantidad de horas trabajadas por persona ha disminuido, lo que ya refleja una tendencia a la reducción de la jornada laboral. Un fenómeno, puntualiza, que no ha resultado en un incremento significativo de la productividad.

Sin embargo, explica que el aumento de la productividad por hora trabajada no implica que la reducción de las horas trabajadas por ocupado haya estado detrás. De hecho, la productividad por hora trabajada ha crecido, a su juicio, de una manera "pobre" en los últimos años. A pesar de haberse recuperado tras la pandemia, sigue siendo una preocupación en términos de sostenibilidad del crecimiento a largo plazo.

La economista de Funcas también menciona que las bajas laborales —conocido como absentismo— han llevado a que más personas trabajen para producir lo mismo, incrementando los costes laborales sin mejorar necesariamente la productividad. Así, concluye, la productividad por ocupado se ha reducido, mientras que la productividad por hora ha mostrado sólo un crecimiento modesto.

Ofensiva empresarial

El debate sobre la reducción de la jornada laboral ha generado una fuerte reacción por parte de las organizaciones empresariales en las últimas horas, con Antonio Garamendi, presidente de la CEOE, a la cabeza. El líder de la patronal ha acusado al Gobierno de querer imponen la reducción y ha señalado que "si esta es una medida política, que la tomen. Nosotros no la compartimos, pero que lo hagan".

El punto álgido del desencuentro entre los empresarios y el Gobierno llega cuando la vicepresidenta Yolanda Díaz y su gabinete han dejado claro que la reducción de jornada llegará, sí o sí, con acuerdo o sin él. Ante esto, Garamendi ha señalado que la patronal ha realizado múltiples propuestas sobre la reducción de la jornada, pero ha acusado al Gobierno de no querer dialogar sobre cuestiones como el absentismo y las horas extras, que podrían dar mayor flexibilidad a las empresas.

El presidente de CEOE, Antonio Garamendi, el presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo; y el presidente de CEIM, Miguel Garrido; durante la clausura de la Asamblea General de CEIM 2024.

El presidente de CEOE, Antonio Garamendi, el presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo; y el presidente de CEIM, Miguel Garrido; durante la clausura de la Asamblea General de CEIM 2024. Carlos Luján Europa Press

Por su parte, Gerardo Cuerva, presidente de Cepyme, ha advertido que las pequeñas y medianas empresas no están en disposición de reducir la jornada laboral de manera generalizada. Las pymes, asegura, "no pueden aguantar" una reducción del tiempo de trabajo sin un análisis detallado de los sectores y territorios afectados.

Cuerva, que acusa igualmente al Gobierno de imponer decisiones sin un diálogo social sincero. "¿Tiene que venir el Gobierno a imponer una jornada laboral en donde no se puede permitir?", se ha lamentado.

Por su parte, Lorenzo Amor, presidente de la federación de autónomos ATA, se ha unido a las críticas argumentando que la reducción de la jornada laboral incrementará los costes para las pequeñas empresas.

Para el líder de la organización de trabajadores por cuenta propia, la idea de trabajar menos y ganar lo mismo es atractiva, pero inviable si se aplica de manera generalizada. "Reducir la jornada laboral no es bueno para el país", ha sentenciado Amor.