El líder del PSC, Salvador Illa (i) y el presidente en funciones de la Generalitat, Pere Aragonès (d).

El líder del PSC, Salvador Illa (i) y el presidente en funciones de la Generalitat, Pere Aragonès (d). David Zorrakino / Europa Press

Economía

Fedea calcula que el concierto catalán permitirá ingresar a la Generalitat hasta 13.200 millones de la caja común

El ente, basándose en el preacuerdo, calcula que la región elevaría su financiación hasta un 50%.

7 agosto, 2024 11:18

Hay muchos interrogantes sobre el concierto catalán pactado entre el PSC y ERC para investir a Salvador Illa. Con todo, Fedea ha hecho números con una aproximación del impacto que podría tener el acuerdo en la financiación de la región. Unos cálculos que apuntan a que la financiación de Generalitat se elevaría entre 6.600 y 13.200 millones gracias a esta medida.

Esto supone, según indica el informe recién lanzado por el ente, que el cupo catalán aumentaría la financiación de la región entre un 25% y un 50%.

Cabe recordar que Cataluña, según los cálculos de Fedea, no es una región infrafinanciada, situación en la que sí están Comunidad Valencia o Murcia, por citar dos. De hecho, la regiòn catalana cuenta con una financiación por habitante ajustado de 101 frente a una media de 100 para el conjunto de las autonomías de régimen común.  

De esta manera, el concierto pondría a Cataluña "claramente por encima de cualquier otra comunidad no foral" en materia de financiación, añade el análisis, firmado por Ángel de la Fuente.

El problema, además, está en que el dinero que se quiera destinar a mejorar la financiación de Cataluña (y la de otras comunidades, si se decide así) "tendrá que salir de algún sitio".

Si ninguna comunidad puede perder financiación, Fedea pronostica que al Estado no le quedará otro remedio que ajustar a la baja su gasto, reduciendo las prestaciones de su competencia, como las pensiones o la defensa, o aumentar (ahora o en el futuro) la presión fiscal sobre la menguante parte de la población que siga estando sujeta a sus tributos.

En este sentido, si el Estado recurriera a una subida del IRPF para compensar la pérdida de recursos sin afectar a la financiación autonómica o reducir su gasto, tendría que incrementar en un 29,5% la recaudación del tramo estatal del impuesto en lo que quedaría del territorio común tras la salida de Cataluña.

Si se optase por aceptar la caída de ingresos y la trasladase íntegramente a la financiación de las demás CCAA, ésta tendría que reducirse en un 10,7% en promedio.