La presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, considera que la Unión Europea debe adoptar una posición más firme acorde con su papel de principal bloque comercial del mundo y "sacar músculo" en defensa de sus intereses, incluyendo la posibilidad de abordar de manera conjunta las compras de energía y otras materias primas.
Durante su intervención en un coloquio en el Foro Económico Mundial que se celebra en Davos (Suiza), la francesa ha apostado por que el bloque tome conciencia de que también es el mayor comprador mundial.
A este respecto, la presidenta del BCE se ha mostrado partidaria de explorar alternativas para "jugar en equipo" y llevar a cabo conjuntamente compras de energía, minerales u otros productos básicos para la economía europea como contrapeso de "acciones concertadas desde el lado de los vendedores".
El poder de la UE
"La guerra nos ha mostrado lo débiles que somos al 'jugar tan abiertos, pero también nos ha permitido tomar conciencia de lo poderosos que somos si permanecemos unidos", ha afirmado Lagarde, para quien "cuando saca músculo, Europa es una fuerza increíble". A pesar de ello, la banquera central ha admitido que el bloque de países a veces se marca goles en propia meta ralentizando procesos y mirando objetivos nacionales en vez de europeos.
"Creo que estamos en un momento en el que Europa puede actuar como un formidable equipo de jugadores al mismo tiempo que como árbitro", ha añadido en referencia al "formidable poder" de Europa en múltiples campos como el comercio o la tecnología.