La Encuesta de Población Activa (EPA) del segundo trimestre, en su multitud de datos, vuelve a dejar cifras mejores... y cifras peores. Entre las primeras, una tasa de desempleo que baja al 14%, la más reducida desde 2008; y entre las segundas, un descenso el paro y una creación de empleo que se moderan.
El paro bajó en 123.600 personas en el segundo trimestre del año, lo que supone un 3,7% menos que en el trimestre anterior, hasta situarse el total de desempleados en 3.230.600 personas. Este descenso del desempleo es inferior a los registrados en todos los segundos trimestres de los últimos seis años, de forma que hay que remontarse hasta el segundo trimestre de 2012 para encontrar un dato peor: el que arrojó un aumento del paro de 63.100 personas.
La tasa de paro bajó casi siete décimas en el segundo trimestre, hasta el 14%, su nivel más bajo desde el cuarto trimestre de 2008, mientras que la tasa de actividad subió cuatro décimas, hasta el 58,7%, tras aumentar el número de activos en 210.200 personas entre abril y junio (+0,9%).
Entre abril y junio de este año se crearon 333.800 empleos, un 1,7% más que en el trimestre anterior, lo que situó el total de ocupados en 19.804.900 personas, su mayor nivel en diez años. Sin embargo, este aumento de puestos de trabajo es inferior a los que se lograron en los segundos trimestres de 2017 y 2018, cuando la ocupación se incrementó en 375.000 y 469.900 personas, respectivamente.
La creación de empleo registrada en el segundo trimestre se concentró en el sector privado, que generó 352.900 empleos (+2,1%), ya que el sector público apenas destruyó 19.100 puestos de trabajo, un 0,6% menos respecto al trimestre anterior.
El número de asalariados se incrementó en 330.500 personas (+2%), repartiéndose este aumento casi por igual entre los asalariados con contrato temporal, que subieron en 166.100 personas (+3,9%), y los asalariados con contrato indefinido, que avanzaron en 164.500 personas (+1,3%).
En el segundo trimestre de este año, la ocupación femenina superó por primera vez los 9 millones de personas y el número de asalariados con contrato indefinido alcanzó la cifra más alta de la serie histórica, con 12.288.500 trabajadores fijos.
En el último año el paro ha descendido en 259.500 personas (-7,4%) y se han creado 460.800 empleos, a un ritmo de crecimiento anual de casi el 2,4%, el más moderado desde el primer trimestre de 2018.