El impacto de la crisis de la Covid-19 en el mercado laboral fue notable en 2020, como se esperaba. El año pasado se destruyeron casi tantos puestos de trabajo como los que se crearon en 2019, unos 360.000. Además, el número de españoles parados registró su mayor incremento de los últimos 11 años.
Así lo indican los últimos datos ofrecidos por los ministerios de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones y Trabajo y Economía Social. Durante el año pasado, por el efecto de la crisis pandémica, el paro subió un 23%, unas 724.500 personas. Así, España alcanzó la cifra de 3.888.137 parados.
Para esto ha sido inestimable la colaboración de diciembre. En el último mes del año, tradicionalmente bueno para el empleo, el paro subió en 36.895 personas, el mayor aumento desde 2009. El propio departamento que dirige Yolanda Díaz admite que la pandemia "ha truncado la campaña navideña".
En enero, el mayor incremento del paro se registró en el sector de la Construcción, con 18.496 personas más, una cantidad que supone un alza del 6,17%. Le siguen la Industria con 9.885 personas más (3,24%), Servicios con 8.134 personas más (0,3%) y el colectivo 'Sin Empleo Anterior', que subió en 1.621 personas (0,46%).
Joaquín Pérez Rey, secretario de Estado de Empleo, ha informado de que, en gran medida, el incremento del paro se debe a personas que se apuntan a las listas de desempleo para poder acceder a prestaciones. A esto se suma que las propias oficinas del SEPE hacen actualizaciones automáticas del paro para evitar la asistencia presencial.
Por otro lado, Pérez Rey ha indicado que espera que el paro estimado de 2020 se quede en el 15,8%, 1,7 puntos más que en 2019.
Por otro lado, aunque en diciembre hay un ligero incremento de las afiliaciones en términos desestacionalizados y en términos mensuales (7.350 ocupados más), en el cómputo global de 2020 el sistema de la Seguridad Social pérdió 360.105 afiliados, una caída del 1,86%.
A pesar de esta destrucción del empleo, hay regiones en positivo. Castilla-La Mancha, con un 0,54%, y Murcia, que sumó un 0,38% de afiliados en el año, son las comunidades que registraron tasas positivas en términos interanuales.
Sin embargo, el resto perdió afiliados. Lo hizo con mayor intensidad Canarias, que registró un 5,53% menos de afiliados que en diciembre de 2019, y Baleares, con una reducción del 4,18%.
ERTE
Por otro lado, el año 2020 se cerró con 755.613 personas protegidas por los expedientes de regulación temporal del empleo (ERTE), 95.607 personas menos que en noviembre si tenemos en cuenta la serie revisada en función de las personas en alta afectadas.
Sin embargo, si se compara la cifra de personas notificadas en esa fecha, se aprecia un incremento de 8.033 personas.
Los 755.613 trabajadores en ERTE con que se terminó 2020 suponen un 5,2% de los afiliados del Régimen General, aunque geográficamente existe una importante concentración de los mismos.
Las dos provincias canarias son las que tienen un mayor porcentaje de afiliados bajo alguna modalidad de ERTE. La provincia de Las Palmas de Gran Canaria cerró el año 2020 con 45.100 personas protegidas, el 13% de sus afiliados, mientras que Santa Cruz de Tenerife fue la segunda, con 34.106 personas protegidas, el 11% del total de sus afiliados.
La tercera fue Baleares, con un 9,9% de trabajadores afectados, en total, 30.986 a 31 de diciembre.