Aunque la vacunación contra la Covid-19 es voluntaria en España, negarse a recibir el antígeno puede tener importantes consecuencias laborales. Si se dan las circunstancias, las empresas podrán despedir a los trabajadores que decidan no vacunarse.

Sin embargo, para ello, las empresas tendrán que incluir esta condición, la de la vacunación contra el coronavirus, dentro de su plan de prevención de riesgos laborales.

De hecho, con este requisito cumplido, los empresarios podrán incluso negarse a contratar a personas que hayan decidido no vacunarse contra la Covid-19.

Un momento del primer acto de vacunación en el área de salud de Ibiza y Formentera, que ha tenido lugar este lunes en la residencia de Sa Serra. EFE

“Los tribunales son los que interpretan, pero la normativa de la prevención parte del principio de la responsabilidad de un empresario sobre la salud de sus trabajadores”, explica a Invertia Ana Gómez, presidenta de la Asociación Nacional de Abogados Laboralistas (Asnala).

De esta manera, “si el empresario evalúa que para preservar y prevenir la salud de sus trabajadores estos tienen que tener la vacuna de la Covid y la incluye en el plan de prevención de riesgos laborales, el trabajador está obligado a recibirla”.

Legitimación del despido

Aunque esta acción de prevención entraría en colisión con el derecho del trabajador a no recibir la vacuna, por considerarse una injerencia en el cuerpo humano, sería un juez el que acabaría tomando una decisión. Y Gómez considera que los tribunales, si se da el caso, acabarán legitimando el despido por rechazo voluntario de la vacuna de Covid-19.

Cabe recordar que el precio de la vacuna no será una razón para rechazarla. Los planes del Gobierno son inmunizar contra el coronavirus gratis al 100% de la población española antes de que termine 2021.  

Por lo pronto, no se conocen empresas que hayan incluido la vacunación contra el coronavirus en su plan de prevención de riesgos laborales. Sin embargo, la presidenta de los laboralistas españoles considera que los habrá.

“Me atrevo a decir que todas las empresas que están en teletrabajo y que están haciendo constantes test a su trabajadores impondrán la vacunación” en sus planes de prevención de riesgos laborales, afirma.

Debate

El debate sobre esta cuestión comenzó con las primeras pistas sobre el inicio de la vacunación en Europa. La presidenta del Comité Económico y Social Europeo (CESE), Christa Schweng, dijo por entonces, en una entrevista concedida a EFE, que "evidentemente es posible" que las empresas eviten contratar a un trabajador si no quiere vacunarse contra la Covid-19.

"Como empresario, puedo decidir con quién firmo un contrato", indicó la presidenta de este órgano consultivo de la Unión Europea, que emite dictámenes a las instituciones comunitarias en representación de empresarios, trabajadores y organizaciones de la sociedad civil.

Una oficina antes de la pandemia.

"El trabajador puede decidir si quiere trabajar (para la empresa) o no" en caso de que se exija la vacuna para firmar un contrato, aunque "se tendría que ver si un empresario quiere solo a personas vacunadas en su empresa". "No sé lo que harán", comentó.

Ante las campañas de vacunación que empezaban a presentar los gobiernos europeos, la presidenta del CESE no creía que la inyección tuviera que ser obligatoria, "porque una vacuna es un ataque y cada uno debe decidir individualmente si lo quiere o no para sí mismo".

El Gobierno de España comparte, al menos, la no obligatoriedad de la vacunación. Así lo ha indicado en varias ocasiones tanto el ministro de Sanidad, Salvador Illa, como fuentes dentro de la comisión que ha elaborado la estrategia de inmunización de la Covid en nuestro país.

Lo cierto es que, según ha ido avanzando el desarrollo y la aprobación de vacunas, la actitud de los españoles hacia la inmunización ha sido más positiva. Según una encuesta realizada por SocioMétrica para EL ESPAÑOL, el 68% de los españoles está dispuesto a vacunarse.

De hecho, el último barómetro del CIS de diciembre indica que la tendencia de población a favor de la vacunación ha crecido en los últimos meses. Eso sí, según el citado estudio de SocioMétrica, la mayoría de los ciudadanos no estaría de acuerdo en que la vacunación fuera obligatoria.

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