Aunque la subida del salario mínimo interprofesional (SMI) de 15 euros al mes (hasta los 965) ya está pactada con los sindicatos (pero sin acuerdo con la patronal), el Gobierno se toma su aprobación con calma. Ha decidido dejar la aprobación del correspondiente decreto para el Consejo de Ministros de la próxima semana, aunque la subida tendrá aplicación retroactiva desde el 1 de septiembre. 

Mientras, el proyecto del real decreto para subir el SMI se ha sometido a escrutinio público, con su correspondiente memoria de análisis de impacto normativo y económico. Este documento desglosa, por ejemplo, el impacto que se prevé que tendrá esta medida en el campo de ingresos de Seguridad Social, gracias al incremento de las bases de cotización que genera la subida del SMI y que tendrá que ser abonado por las empresas o empleadores.

Según el documento y fuentes consultadas del Gobierno, la cantidad que los empresarios que tendrán que abonar por el incremento de las bases de cotización será de unos 9,75 millones de euros adicionales, como mínimo, por los meses de septiembre, octubre, noviembre y diciembre. 

Este es el cálculo del incremento de ingresos para la Seguridad Social por trabajadores del Régimen General sin sistemas especiales. El número de beneficiados por el aumento del SMI de este colectivo es de 934.997, que tienen una base media de cotización en 2021 de 854,91 euros al mes. 

El incremento de las bases de cotización también se notará en el Sistema Especial de Trabajadores Agrarios por Cuenta Ajena, cuyas cotizaciones generarán unos 1,28 millones de euros adicionales hasta finales de 2021.

Impacto en el SEPE

Mientras, el Sistema Especial de Empleadas de Hogar sumará 1,56 millones de euros adicionales y por las bases de cotización entrarán 1,84 millones más en la Seguridad Social. 

Por otro lado, el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) tendrá que aumentar su partida para las cotizaciones que paga a perceptores de prestaciones de desempleo (subsidio y prestaciones contributivas) por la subida del SMI. Tendrá que abonar unos 3,30 millones más. 

Es decir, que solo por el incremento de las bases de cotización, la Seguridad Social ingresará entre septiembre y lo que queda de año 17,7 millones de euros. 

La medida también tendrá efecto sobre los subsidios públicos, aunque en este caso el impacto no se ha calculado para cuatro meses, sino para 2022 completo. En este contexto, el gasto público tendrá que aumentar en 25,8 millones de euros. Aunque esto, presumiblemente, se tendrá que corregir de cara a la subida del SMI del próximo año.

El texto de impacto normativo recoge en qué cantidad se quedarán los subsidios tras la subida del SMI, indicador al que están vinculados. Los que son por desempleo pasarán (como el agotamiento de prestación contributiva el de mayores de 52 años) de los 712,50 euros al mes actuales a los 719,63. 

También se aplicará la subida sobre el subsidio para trabajadores eventuales del sistema especial agrario de la Seguridad Social de Andalucía y Extremadura, que equivale al cien por cien del SMI. 

Presumiblemente, estos impactos aumentarán en 2022. Para entonces, el Gobierno se ha comprometido con UGT y CCOO a volver a subir el SMI, aunque no hay una cifra cerrada sobre la mesa. Con todo, durante la semana pasada, los sindicatos aseguraron no bajarían de los 1.000 euros al mes.

Es decir, 35 euros más una vez se apruebe la subida del salario mínimo la próxima semana.